40 años de Arco: una memoria de la feria por 40 artistas, galeristas, coleccionistas y comisarios



1. Juana de Aizpuru: “Ahora la feria es distinta, pero también imparable”

Galerista y primera directora de Arco (1982-1986)

“El momento más inolvidable de la historia de Arco fue al abrir las puertas del edificio de Castellana donde se celebró la primera edición. Corría el año 1982 y allí estaban todos los grandes de la época: Chillida, Tàpies, Palazuelo, Gordillo… Y también todos los medios de comunicación, dispuestos a apoyarnos. Nunca agradeceré ese apoyo lo suficiente. El mayor apuro lo viví también ese primer año: a pocas horas de cerrar, me avisaron de que el presidente del Gobierno, Leopoldo Calvo Sotelo, y su esposa estaban viniendo. Esperé a pie de calle improvisando unos canapés y luego recorrimos la feria durante más de una hora. Tengo muchas esperanzas en el futuro de Arco. La feria es distinta a cuando empezamos, pero es ya imparable”.

Minutos previos al corte de la cinta inaugural de la primera edición de Arco, celebrada en 1982 en el Pabellón de Exposiciones del Paseo de la Castellana de Madrid. IFEMA2. Manuel Borja-Villel: “Ya no es un espectáculo, sino una feria más humana”

Director del Museo Reina Sofía (Madrid)

“El tiempo de Arco es también el tiempo de este país. Ha pasado de ser un gran espectáculo a mostrarse como una feria más humilde, quizá más humana. Por ello, si he de escoger un recuerdo, me quedo con un acto de generosidad. Hace tres o cuatro años, visitando Arco con el equipo del museo, nos encontramos con la galerista Helga de Alvear cuando contemplábamos, en un stand cercano al suyo, una pintura del suizo Rémy Zaugg cuyo precio escapaba a nuestro presupuesto. Helga nos preguntó qué pensábamos de esa obra e intentamos explicarle todas sus virtudes. No dijo nada, asintió y se fue. El director de la galería en la que se encontraba este cuadro nos comunicó al día siguiente que Helga lo había reservado para el Museo Reina Sofía. Hoy forma parte de nuestras colecciones”.

3. Patricia Phelps de Cisneros: “Madrid ya es una capital latinoamericana”

Coleccionista

“Arco se ha vuelto un lugar de referencia para el mundo iberoamericano del arte. No solo por la feria, sino porque todo Madrid se anima para mostrar lo mejor de sí. Instituciones, galerías, colecciones particulares: todos hacen un esfuerzo, del cual se benefician los artistas en general, y sobre todo los españoles. Madrid ya es una capital latinoamericana, ha aumentado mucho los artistas, coleccionistas, galerías, curadores y críticos latinoamericanos que llegan a Madrid y se sienten en casa. Cada vez son más las personas que llegan a Arco con interés y se encuentran con un lujo de oferta cultural, desde el Prado y el Reina Sofía hasta la Academia de San Fernando, los teatros, la ópera, la oferta culinaria, el flamenco; lugares donde siempre hay sorpresas”.

4. Rogelio López Cuenca: “No soy muy devoto de Arco. No todo cabe en una feria”

Artista

“No soy muy devoto de Arco. Me parece que las prácticas artísticas contemporáneas son más múltiples y diversas que lo que cabe en la feria, pero es lo que tenemos, dado que no hemos conseguido armar nada parecido a una Documenta o a la Bienal de Venecia. Y si se piensa en las fallidas operaciones en ese sentido, casi mejor que nos quedemos como estamos. Por lo demás, cómo no celebrar la ocasión de encontrarse con amigos”.

5. Ignasi Aballí: “El problema es que Arco es el único acontecimiento internacional en nuestro país”

Artista

“Arco es un acontecimiento muy importante para el arte contemporáneo español, el más relevante en cuanto a impacto económico y visibilidad de los artistas. En ningún otro momento del año el sector del arte centra tanta atención en los medios ni tiene tanta repercusión. Y el problema quizá sea ese: que es el único acontecimiento internacional en nuestro país”.

6. Ouka Leele: “El momento más bonito fue el inicio, luego se volvió más fría”

Fotógrafa

“El momento más bonito fue el inicio. Luego se hizo cada vez más fría, solo se hablaba de dinero. Al comienzo hubo una gran apertura e interés por lo artístico. La feria formó parte de la explosión de libertad y experimentación de la Movida. Para nosotros fue un punto de encuentro, una cita anual. El mismo espíritu que reinaba en la ciudad también estaba en Arco”.

El pintor Antonio Saura y la cantante Rocío Jurado en la inauguración de Arco de 1982.MANUEL FERNÁNDEZ7. Inés López-Quesada y Silvia Ortiz: “Es una feria joven de 40 años”

Galeristas, Travesía Cuatro (Madrid)

“Nuestro primer Arco fue en 2005. El día que íbamos a la feria hubo un atentado de ETA cerca de Ifema, lo que hizo que la primera experiencia fuese algo traumática. Ese año, México fue el país invitado. Todos los artistas, comisarios y galeristas invitados fueron el germen de lo que ha sido Travesía Cuatro, de nuestra relación con México y Latinoamérica. Ahora vive un buen momento. Tiene una identidad propia, alejada de los productos estandarizados como otras ferias. Es una feria joven de 40 años”.

8. Jaume Plensa: “En mi primer Arco, vino Chillida a felicitarme”

Artista

“Arco fue un acierto desde su inicio. Hace tantos años que no estoy seguro, pero creo que estuve en el primer Arco de 1982 con una pequeña galería de Vic llamada La Tralla. Fue inolvidable: yo era muy joven y vino Chillida a felicitarme por el trabajo expuesto en el stand. Después siempre conservamos una gran amistad. Tal vez por ser la feria de referencia en mi país, siempre le he dado mucho valor. La considero un lugar de encuentro e intercambio extraordinario”.

9. Nuria Enguita: “Es un lugar donde fortalecer la mirada”

Directora del IVAM (Valencia)

“Arco constituye un fenómeno singular en el ecosistema del arte en nuestro país. En sus inicios, cuando aún no se habían desarrollado las estructuras del arte contemporáneo, era el gran lugar de encuentro. Aún ahora continúa siéndolo, y no solo de las galerías, sino de muchas de las personas que se dedican al arte contemporáneo. Como directora de una institución, es una cita obligada para establecer contactos que puedan derivar en proyectos futuros. Es siempre una fuente de inspiración, así como un lugar para fortalecer la mirada. Si su dirección y comité tienen independencia y continúan atentos a los cambios sistémicos, me parece que no corre, por ahora, ningún peligro de desaparición”.

10. José Lebrero: “Es una experiencia única en lo cultural y lo personal”

Director del Museo Picasso Málaga

“Cuando Arco empezó, yo estudiaba en Alemania. Mi viaje anual para visitar Arco era una manera de enterarme de lo que pasaba en España, más allá de la evolución del arte. En Arco me deslumbró descubrir lo último de Cindy Sherman y me impactó conocer a una joven galerista llamada Helga de Alvear, persona de inmenso poder económico y pasión a la que pude tratar años después en Art Basel. El viaje a Arco sigue siendo igual de importante hoy: ir a Madrid durante los días de Arco es una experiencia única en lo artístico, lo cultural y lo personal”.

11. Carlos Urroz: “Ha tenido el papel que en otros sitios desempeñan los museos”

Director de TBA21 y exdirector de Arco (2010-2019)

“Arco empezó como una fiesta a la que todo el mundo quería ser invitado. Después fue una universidad, con esos congresos a los que acudían comisarios de toda Europa y Latinoamérica. Y por último se convirtió en un mercado: se empezó a ir a Arco para comprar y no solo para tomarse una copa. La feria ha tenido el papel que, en otros países, han desempeñado los museos: generó un espacio para el arte contemporáneo una década antes de que se inaugurase el Reina Sofía. La feria no corre peligro de desaparición: está muy consolidada gracias al apoyo de las galerías españolas y depende de un organismo público, lo que a veces se critica, pero es algo que asegura su supervivencia. ¿Un recuerdo? La cena en la Embajada francesa donde se fraguó la creación del Palais de Tokyo de París, que ahora cumple 20 años.”.

12. Ana Laura Aláez: “Cuando acaba Arco, España sigue siendo frágil para el arte”

Artista

“Arco es una feria de afectos, porque te encuentras con artistas a los que conoces personalmente o por su obra. La diferencia con Art Basel o Frieze es que cuando se acaba Arco queda claro que España sigue arrastrando una fragilidad en todos los sentidos. Es decir, que no hay una estructura real que cuide al arte, que se adelante a resolver los problemas. Los países de esas otras ferias, en cambio, han trabajado para armar un tejido político y económico que trabaja para proteger la cultura y defiende a muerte a sus artistas”.

13. Luis Valverde y José Martínez: “Es un corcho muy difícil de hundir”

Galeristas, Espacio Mínimo (Madrid)

“Nuestro primer Arco fue en 1994, el último que se celebró en la Casa de Campo. Llevábamos años con el negocio, pero no dejábamos de ser dos pequeños galeristas de Murcia que, de repente, se encontraron al lado de Leo Castelli sacando obras de Bruce Nauman de una caja. En Arco hemos visto a Soledad Lorenzo pasando la aspiradora de su stand o a Juana de Aizpuru quitándose los rulos. La feria lleva 40 años sobreviviendo y es un corcho muy difícil de hundir. No tenemos duda de que saldrá adelante”.

14. Thaddaeus Ropac: “Nunca ha sido una torre de marfil para la élite intelectual”

Galerista

“Para mí, no solo ha sido una puerta de acceso a España. Gracias a Arco, entiendo mucho mejor Latinoamérica. Se dice que la feria compite con Art Basel Miami. Puede que allí vendamos más, pero ­Arco es más seria. Empecé a ir hace 25 años, cuando había menos galerías internacionales, y me gustó que fuera un acontecimiento abierto a la ciudad, al que acuden los Reyes, pero también el ciudadano de a pie. Fue la ­primera feria que tuvo un público amplio y no solo especializado. Arco nunca ha sido una torre de marfil para la élite intelectual. Recuerdo una velada con Gilbert & George. Siendo británicos, esperaban cenar a las siete de la tarde. La cita era a las diez de la noche, pero todo el mundo llegó tarde y no empezamos hasta la medianoche, mientras ellos mendigaban una cesta de pan al camarero porque se morían de hambre. Después, Elena Ochoa los llevó a un tablao flamenco hasta altas horas de la madrugada. Todavía se acuerdan de esa noche con una mezcla de horror y ­fascinación”.

15. Alicia Framis: “Es una feria que incita al compañerismo, amable e inclusiva”

Artista

“Ir a Arco es volver a casa. Es un lugar donde te cruzas con caras conocidas por los pasillos. Allí, los artistas compartimos nuestras angustias y logros. Es una feria que incita al compañerismo entre creadores y galeristas, una feria amable e inclusiva, comparada con otras citas parecidas”.

‘Vestido para protegerse de lo absurdo’, de Alicia Framis, en Arco 2019.CARLOS ROSILLO16. Catherine David: “Fue la locomotora que tiró del arte en España”

Comisaria y directora adjunta del Centro Pompidou (París)

“Arco fue la locomotora que tiró del arte contemporáneo en España, donde estaba algo adormecido. La feria tuvo un papel muy activo en la creación de un discurso sobre el arte y su historia que se adelantó al que luego desarrollaron los museos. Es una de las primeras ferias que entendió que también tenía que abordar problemáticas ajenas al mercado. Se habla de competencia con Art Basel Miami Beach, pero esta última es una feria más superficial. Deseo larga vida a Arco y espero que no se vea muy penalizada por el contexto actual”.

17. Bernardí Roig: “Es un lugar para la vanidad, el conocimiento y el deseo”

Artista

“Parece una obviedad, pero Arco es una feria de arte: un lugar de transacciones donde se intercambia dinero por gusto. También es un lugar para la vanidad, el conocimiento, el deseo, los tropiezos y la insatisfacción. Llevo desde 1990 y el gran acontecimiento, en estos 30 años, siempre ha sido el mismo: la venta, o no, de las obras que en ella presentaba. Lo que sucedía en esos cinco días determinaba la posibilidad de seguir financiando mis ideas”.

18. Lucía Casani: “Siento que hemos crecido y madurado a la vez”

Directora de La Casa Encendida (Madrid)

“Arco es una parte fundamental de mi ecosistema, siento que hemos crecido y madurado a la vez. Para mí ha sido un lugar, primero, de aprendizaje y formación y, más tarde, el punto de encuentro con los profesionales del sector donde descubrir nuevos artistas. Me gusta empezar la visita por la sección Opening con su selección de galerías emergentes donde siempre encuentras propuestas muy estimulantes. En la feria he descubierto artistas como Ad Minoliti, que expone ahora en La Casa Encendida; Marina González Guerreiro y Eva Kot’átková, que están programadas este año, o Donna Huanca y Gabriel Chaile, con los que nos gustaría trabajar en un futuro”.

19. Heinrich Ehrhardt: “Juana de Aizpuru vendió la feria descalza a los alemanes”

Galerista

“Una de las mejores anécdotas relacionadas con la feria, en la que estamos presentes desde el primer año, ocurrió con Juana de Aizpuru, durante una de nuestras giras por Europa para convencer a galerías para que participasen en Arco. Fue en la feria Art Cologne. Eran tantos stands a visitar que, en algún momento, Juana ya no aguantaba más sus stilettos y se descalzó. Continuó la segunda mitad de las visitas descalza, con absoluta naturalidad, sin perder su reconocida elegancia y, sobre todo, sin perder ni un ápice de su arrollador poder de convencimiento. Se ganó el respeto de toda la feria”.

20. Cuauhtémoc Medina: “Constituye un raro momento en que el español es lingua franca”

Conservador jefe del MUAC (México)

“Arco es el aeropuerto donde empieza el año, y permite sentirse parte de una cosmópolis en un raro momento donde el castellano es la lingua franca. La creación de Art Basel Miami en 2002 desestabilizó la centralidad de Arco y hubo temores sobre su decadencia. Los esfuerzos de la dirección, a veces en fricción incluso con el recinto ferial, por restablecer la marca a nivel global y con un programa complejo ha rendido frutos. De momento, tiene suficiente solidez en España para no estar en riesgo, aunque la crisis de la pandemia nos ha dejado a todos, individuos, países e instituciones, ante retos que desconocíamos”.

El alcalde de Madrid, José María Alvarez del Manzano (izquierda), y el ministro de Cultura, Jordi Solé Tura, en la inauguración de Arco en 1992. ULY MARTIN21. Belén Herrera Ottino: “Quedé atrapada en una escultura de Henry Moore”

Galerista, Marlborough (Madrid)

“En 2003 llegué al stand de Marlborough, que estaba repleto de público, tratando de sortear a los visitantes y conseguir perspectiva para contemplar un cuadro de Bacon. Me caí y me quedé encajada dentro de una fabulosa escultura de Henry Moore. Sentí a partes iguales bochorno y preocupación por no dañar la obra. De repente, un caballero me tendió la mano y me sacó con mucha dignidad del entuerto. No encontré palabras para agradecerle el gesto y al mirarle a los ojos descubrí que se trataba de Norman Foster. Unos meses después, entraba a trabajar en Marlborough”.

22. Rafael Canogar: “En Arco me llamaron puta”

Artista

“A mis 86 años, y con 70 trabajados, puedo decir que he sido testigo de todas las ediciones. Estuve en la primera en el paseo de la Castellana y pienso asistir a la que empieza ahora. A la primera llevé a Henri Cartier-Bresson, gran amigo mío. De esta feria he aprendido que pueden cambiar los soportes y las tendencias, pero la pintura sobrevive siempre. Recuerdo una anécdota de los primeros años: el pintor Lucio Muñoz y yo nos encontrábamos en el stand de Juana Mordó, junto a nuestras obras, cuando pasó el historiador y crítico Julián Gállego y nos gritó que parecíamos putas. Nos quedamos muertos de bochorno. No volvimos a acercarnos a nuestra obra”.

23. Pedro Carreras e Ignacio Mugica: “El primer año expusimos junto al local de los electricistas”

Galeristas, CarrerasMugica (Bilbao)

“Nuestra primera solicitud para exponer en Arco fue en 1996. La feria estaba muy demandada y acceder no era fácil. En una primera selección no nos aceptaron, pero fuimos tan insistentes con Rosina Gómez-Baeza que dos días antes de inaugurar nos dio la opción de exponer en una esquina del local de los electricistas. Montamos el stand la noche antes. Para nosotros fue un éxito. De eso hace ya 26 años, no hemos faltado en ninguna ocasión. Ahora, en el pasillo central”.

24. Imma Prieto: “Nos abrió al arte contemporáneo tras el franquismo”

Directora de Es Baluard (Palma)

“Ha sido el lugar desde el que España se ha abierto al arte contemporáneo. Veníamos de una época oscura, del franquismo. Con el esfuerzo de las madres del galerismo español (Juana de Aizpuru, Pilar Carbonell, Helga de Alvear, Elvira González o Soledad Lorenzo), Arco se ha consolidado como plataforma no solo mercantil, sino de encuentro, trabajo y debate”.

25. Patrizia Sandretto Re Rebaudengo: “Ha sabido dar espacio a los jóvenes”

Coleccionista

“Siempre he apreciado su identidad como feria de investigación y experimentación, que sabe dar espacio a los jóvenes. Entre mis mejores recuerdos está la exposición de mi colección en el Canal de Isabel II en 2000, el año en el que Italia fue el país invitado, y la alegría que sentí cuando mi colección recibió el Premio A al coleccionismo internacional que concede la Fundación Arco”.

26. Rocío Santa Cruz: “Ha puesto la mirada en las galerías periféricas”

Galerista

“Hay que apoyar esta feria porque es la nuestra. Contemplo con miedo el avance del turbocapitalismo aplicado al mundo del arte. Me refiero a Art Basel, que acaba de zamparse a una feria tan prestigiosa como la FIAC parisiense. A Madrid vienen galerías que son grupos inversores, pero también estamos nosotros, los medianos y pequeños galeristas que defendemos a nuestros artistas. Arco ha puesto la mirada en galerías periféricas españolas y es un acierto que todos tenemos que apoyar para que no nos coman los tiburones”.

Liliana Porter posa junto a su obra en el stand de EL PAÍS en Arco 2019.Julián Rojas27. Liliana Porter: “Ha sido pionera en la creación de actos culturales”

Artista

“Las ferias tienen la virtud de reunir de manera concentrada expresiones artísticas de diferentes geografías y, consecuentemente, de diferentes estéticas. Por otro, como se trata de un evento comercial, siempre tiene limitaciones propias de un programa que se define por las necesidades del mercado. Lo positivo de Arco ha sido tener clara esta limitación y plantearse superarla con una serie de actos culturales, de intercambio, discusión y encuentros de muy buen nivel, en los que ha sido pionera”.

28. Soledad Sevilla: “Fue un suceso importante en un país en blanco y negro”

Artista

“Recuerdo la noticia de que Juana de Aizpuru iba a crear una feria en España. Yo trabajaba en Boston en aquel momento. Arco fue un suceso importantísimo en aquella España todavía en blanco y negro de comienzos de los ochenta. Arco es un gran escaparate y una oportunidad económica. Ahí radica también una parte negativa, porque todos los artistas y galeristas aspiran a estar representados, y eso implica frustración para los que se quedan fuera”.

29. Jaime Sordo: “Creó un coleccionismo de calidad que huye de las estrellas”

Coleccionista

“Su internacionalización puso a nuestras galerías y a nuestros artistas en el mercado mundial y en España hizo que existiera el coleccionismo de calle, ese que se mueve en la calidad y huye de las estrellas. Solo me arrepiento de una cosa en la feria: de haber sido cobarde y no haber comprado una obra extraordinaria de Juan Muñoz en 2004″.

30. Helga de Alvear: “En el primer Arco pidieron referencias sobre mi solvencia”

Galerista y coleccionista

“En el primer Arco me interesé por un cuadro de Hans Hartung en el espacio de una galería barcelonesa y fueron a pedir referencias sobre mi solvencia económica a Juana de Aizpuru. Cuatro décadas después, todo el mundo sabe que soy más coleccionista que galerista, como me han llegado a reprochar en Basilea. Arco ha sido importantísimo gracias a la voluntad y personalidad de Juana de Aiz­puru. Ella supo poner en su sitio a burócratas y censores, y dar paso a lo más importante: el arte”.

31. Rosina Gómez-Baeza: “El mundo se percató de nuestra existencia”

Exdirectora de Arco (1986-2006)

“España se interesó por el arte más contemporáneo a través de Arco. Miramos al mundo, y el mundo se percató de nuestra existencia. En determinados años el certamen atrajo a más galerías estadounidenses que Art Basel, Art Cologne o la Fiac, las ferias de ese momento, más centradas en Europa y en el puro comercio. Arco aunó esfuerzos, armonizó e ilusionó mediante la creación de numerosos programas de apoyo, muchos de ellos aún vigentes”.

Arco 1985. A la derecha, Javier Solana, ministro de Cultura, y Joaquín Leguina, presidente de la Comunidad de Madrid.IFEMA32. Emilio Tuñón: “Veías en los stands a Almodóvar, Alaska o Radio Futura”

Arquitecto

“Creo haber ido a Arco todos los años desde que se inauguró. Para los veinteañeros de entonces, recién licenciados y con ganas de conocer, Arco era un revulsivo donde mirar y ver. Lo que veíamos era un adelanto de las tendencias del arte: la instalación, la transvanguardia, la fotografía… Supongo que este año será el de los NFT. Los mejores recuerdos de los comienzos era coincidir por los stands con Pedro Almodóvar, Alaska, Radio Futura o Sigfrido Martín Begué. Una maravilla…”.

33. Carmen Calvo: “Es el lugar donde dar a conocer nuestra obra, no solo venderla”

Artista

“No soy artista de pasillos y corredores. Lo mío es el estudio. Tengo 72 años y empecé con 19. Desde entonces, mi obra se ha expuesto siempre en la feria con diferentes galerías. Arco fue y sigue siendo una oportunidad para dar a conocer la obra de los artistas. Vienen coleccionistas de todas partes y eso hace posible que tengamos exposiciones en el extranjero, además de vender”.

34. José María Lafuente: “No es una bienal o una fiesta, sino puro mercado”

Coleccionista

“He comprado en Arco, pero no demasiado, cerca del 5% de mi colección. Ha sido más bien un complemento, o un lugar donde establecer contactos con galerías y artistas que luego han fructificado. Pensamos que Arco es una bienal o una fiesta cuando es puro mercado, aunque no siempre lo veamos por su aspecto social. Es una feria muy consolidada, pero corre el peligro de quedar relegada ante Londres, donde se celebra Frieze, o París, en la que acaba de invertir Art Basel”.

35. Àlex Nogueras: “En Arco conocí a mi mujer”

Galerista, NoguerasBlanchard (Barcelona)

“El mejor recuerdo que tengo de Arco es, en la edición de 2004, haber conocido a Teresa, mi mujer. Con los años hemos formado una familia y siento que los astros me fueron descaradamente favorables en esa ocasión. ¿Quién dijo que las ferias no pueden ser románticas? Este año volveremos a los pasillos de Arco juntos, con nuestro hijo de seis años y con el recuerdo de aquel momento en que la vi por primera vez, medio distraída, sentada en una silla. Esta podría ser la singularidad de Arco: nos hace sentir a gusto, como en casa”.

36. Elena del Rivero: “El primer sueño de Arco se volvió una pesadilla ferial”

Artista

“Se dice que Arco nos hizo modernos después de la dictadura y tengo pensamientos encontrados. Recuerdo la ilusión y el aprendizaje del primer Arco, las maravillosas plumas articuladas de Re­becca Horn, mi primer contacto con su trabajo. Ese primer sueño parece ahora una pesadilla ferial, igual de plomiza que muchas bienales. No suelo ir a ferias, pero Arco quizá sea necesaria para la situación española, desmembrada y poco proclive a crear lazos de unión. Les deseo mucho éxito, pues necesitamos la curiosidad y valentía del amante del arte, del coleccionista, del mecenas”.

Visitantes de Arco en 198737. Pedro G. Romero: “Es el gran hito anual porque en España no hay bienales”

Artista, comisario y crítico

“Al principio íbamos a Arco como a la excursión de la Facultad. En 1984 participé en una performance de Espacio P. vestido de obrero, pintando una pared. Ahora voy poco. Un galerista me dijo que mejor no fuera porque hacer chistes en el bar no favorecía mi carrera. Lo curioso es que se ha convertido en el hito anual porque no hay bienales de peso. También para el sistema político-publicitario: las instituciones, que podrían ir a los estudios de los artistas, compran en Arco, el momento de mayor especulación”.

38. Hans Ulrich Obrist: “Ha sido fundamental en mi formación de comisario”

Director artístico de las Serpentine Galleries (Londres)

“¿Mi mejor recuerdo en Arco? Pasar dos horas hablando con Palazuelo. Arco ha sido fundamental en mi formación como comisario. Fue una de las primeras ferias que empezó a invitarnos a participar en mesas redondas, que entendió que lo que quedaba fuera del mercado era importante. Empezábamos a hablar en Arco y continuábamos de noche, en los bares y restaurantes de Madrid. Se fraguó un trabajo de colaboración entre nosotros, una especie de constelación que no era tan frecuente entonces, cuando los profesionales del arte trabajaban de forma más individualista. Arco convirtió el sector español en menos autosuficiente y más internacional”.

39. Elvira González: “Las galerías nos la hemos jugado para que funcionara”

Galerista

“Lo mejor de Arco ha sido el entusiasmo de los galeristas desde el primer momento. Han conseguido que aquello que empezó como un acontecimiento social sea una cita profesional muy seria. Galerías grandes y pequeñas nos la hemos jugado para que esto funcionara pese a las discrepancias que pudiera haber en algún momento. Hemos sido capaces de llevar a nuestros coleccionistas a galerías extranjeras para dar relumbrón a la feria”.

40. June Crespo: “Voy a la feria con la ilusión de una vuelta a la normalidad”

Artista

“Una feria no es un lugar óptimo para mostrar tu trabajo, pero de ahí salen muchas exposiciones. La invitación a la Bienal de Venecia de 2022 llega después de que hubieran visto mi trabajo en ferias como Frieze, Fiac y tal vez Arco. Este año me quedaré más tiempo de lo habitual. Después de los últimos dos años, voy a la feria con la ilusión de una vuelta a la normalidad”.

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