Bután es un país lleno de misterio enclavado entre los picos del Himalaya, entre India y China. Un país que sorprende y maravilla y que está lleno de curiosidades como por ejemplo que estuviera cerrado al turismo hasta mediados de la década de 1970, pero no es este su único dato curioso así que si deseas conocer otras curiosidades sobre Bután sigue leyendo, porque estamos seguros que te van a sorprender.
Bután: 5 curiosidades sobre el país que te sorprenderán
A pesar de que en la actualidad Bután es un país al que se puede viajar, lo cierto es que su Rey Jigme Khesar Namgyel Wangchuck ha optado por limitar el turismo mediante la implementación de leyes bastante curiosas, pero que estarían a la altura de muchas de las tradiciones y alguna que otra prohibición que suelen imperar en este país.
Conozcamos entonces una lista de curiosidades, tradiciones increíbles y prohibiciones extrañas de Bután
1. Ministerio de la Felicidad
En 2008, se creó en Bután el Comité Central para la Felicidad, que tiene como objetivo garantizar el bienestar y la paz interior de las personas . Se convierte así en el único país del mundo que tiene un Ministerio de Felicidad, cuya tasa de Felicidad Nacional Bruta (FNB) es además casi más importante que el Producto Interno Bruto (PIB).
De hecho, la Felicidad Nacional Bruta (FNB) es la forma en que Bután mide su prosperidad. Si bien es común en gran parte del mundo medir el progreso de un país en términos de Producto Interno Bruto, o bienes materiales y desarrollo, Bután ha optado por construir una economía que se esfuerza por seguir los valores budistas, colocando la prioridad en la calidad de vida y felicidad de su gente .
Con este fin, existe el comité dedicado a garantizar que todas las políticas y recursos asignados respeten los principios fundamentales, como el desarrollo sostenible, la conservación espiritual y cultural, la conservación del medio ambiente y el buen gobierno. Y parece que la idea les funciona: una encuesta nacional realizada en 2015 pidió a los ciudadanos que indicaran su grado de felicidad. El 91% de la gente se consideraba «feliz» y, de este porcentaje, el 43% consideraba que era «muy feliz». Podemos decir entonces que la calidad de vida en Bután está determinada por el equilibrio entre la estabilidad financiera y la paz interior.
2. Turismo limitado
Viajar a Bután como turista implica una serie de trámites burocráticos y también es muy caro. Esto se debe a que el país está muy apegado a sus tradiciones y tiende a protegerse de influencias externas excesivas como ya comentamos antes. De este modo, solo se puede visitar el país en grupos de tres o más personas. Si viajas solo o en pareja, los precios serán mucho más elevados.
Por otro lado, todas las visas y documentos de viaje son emitidos por un operador turístico estatal, mientras que todos los gastos de viaje (transporte, alojamiento, impuestos, tarifas de operadores turísticos, visas, seguros y guías) deben pagarse por adelantado, antes de obtener la visa. Al viajar se te asigna un guía que te muestra lo más destacado y relevante del país. Para orientarnos en cuanto a precios, debes saber que la estancia media en Bután cuesta unos 240 € / noche.
3. Respeto por las tradiciones y desconexión del resto del mundo
El pueblo de Bután es muy aficionado a las tradiciones y la cultura popular. El rey intentó por todos los medios proteger a su pueblo de las influencias externas. La televisión e Internet permanecieron prohibidas hasta 1999 . Sin embargo, hoy en día es imposible permanecer totalmente ajeno a lo que está sucediendo en el mundo y las tecnologías modernas, por lo que el Rey decidió recientemente levantar la prohibición. En la actualidad, Bután es, por tanto, el país donde la televisión ha llegado más recientemente seguido poco después por Internet.
4. Respeto por la mujer
En Bután, las mujeres gozan de la máxima consideración. Basta decir que las tradiciones sobre la herencia establecen que todas las posesiones y todas las propiedades pasan por derecho en herencia directa a la hija mayor. Los niños varones, por otro lado, tendrán que construir su propia suerte.
5. Respeto por el medio ambiente
Bután se toma muy en serio la conservación de la naturaleza. Según la ley local, al menos el 60% del territorio nacional debe permanecer cubierto por bosques. Hoy en día, alrededor del 71% del territorio de Bután está cubierto de bosques . De hecho en 2015, Bután estableció un récord mundial cuando se plantaron 50.000 árboles en solo una hora. El compromiso de este país de apoyar al planeta convierte a Bután en el único país anti-Co2 del mundo, es decir, el único país que absorbe más dióxido de carbono del que produce.
Por último señalar que el país también destaca por sus cifras curiosas con respecto a la pandemia por Coronavirus, dado que según datos aportados del Reino de Bután a la OMS, se confirmaron 949 contagios, una sola muerte (en enero de este año) y el haber vacunado ya al 90% de su población adulta.
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