Vanessa Bryant abrió su corazón el lunes diciendo que está luchando para enfrentar la muerte de su esposo, la leyenda de Los Lakers Kobe Bryant, y su hija Gianna, de 13 años, pero continúa ofreciendo oraciones para las víctimas del accidente de helicóptero en Calabasas que cobró sus vidas, además de las otras siete personas.
“He sido reacia a expresar mis sentimientos en palabras”, escribió en su cuenta de Instagram. “Mi cerebro se niega a aceptar que tanto Kobe como Gigi sean han ido. No puedo procesar ambos al mismo tiempo. Estoy tratando de procesar que Kobe ya no está, pero mi cuerpo se niega a aceptar que mi Gigi, nunca volverá a mí”.
“Se siente mal. ¿Por qué debería yo poder despertarme otro día cuando a mi niña no se le ha dado esa oportunidad? Estoy enojada. Ella tenía mucho por vivir. Pero luego me doy cuenta que necesito ser fuerte y estar aquí para mis tres hijas. Estoy enojada por no estar con Kobe y Gigi, pero agradecida que estoy con Natalia, Bianka y Capri”, agregó en el mensaje.
“Sé que lo que siento es normal. Es parte del proceso de duelo. Sólo quería compartirlo en caso de que haya alguien por ahí que esté experimentando una pérdida como ésta. Dios mío, como quisiera que estuvieran aquí y que esta pesadilla tuvieran fin. Sigo orando por todas las víctimas de esta horrible tragedia. Por favor continúen orando por todos”.
Kobe Bryant, de 41 años, su hija y otras siete personas murieron el 26 de enero cuando su helicóptero en el que se encontraban se estrelló contra una ladera en Calabasas. El grupo viajaba del condado de Condado de Orange a Thousand Oaks para un partido de baloncesto en la Academia de deportes Mamba de Bryant.