*Galería Unión busca ser plataforma para artistas que viven y trabajan fuera de la centralidad
Por Ángela Anzo
México, 7 de junio (La Neta Neta).– Dar a conocer las voces, propuestas y narrativas de creadores que habitan y trabajan en los confines de la metrópoli es uno de los objetivos de Galería Unión, proyecto de reciente creación en el que se gestionan y dan a conocer las obras de manera virtual y a través de redes sociales.
Sobre ello habló Mario Paredes, responsable del proyecto, quien en entrevista con La Neta Neta refirió que la propuesta expositiva busca generar reflexiones y dialogar sobre la relación que hay entre arte y periferia, además de mostrar los conflictos y contradicciones que emergen de estos procesos artísticos.
“Hace algunos años llegué a vivir a La Lagunilla, comencé a involucrarme y conocer a varios artistas de la zona, me di cuenta de que había una necesidad de documentar y querer producir arte a través de la cultura de los barrios, como lo son Tepito, la Guerrero y otros lugares… Me fui adentrando en el mundo del arte de estas zonas y eso me llevó a conocer también a artistas de Ecatepec, Tlalnepantla y Nezahualcóyotl”.
El propósito de este espacio es presentar propuestas de arte contemporáneo que dialogan con las narrativas de los contextos llamados subalternos, donde el artista es un agente activo que provoca la reflexión colectiva y muestra otras miradas sobre la cotidianidad, haciendo visibles procesos como el ambulantaje, la invasión de productos hechos en China o la cultura del grafiti.
“Galería Unión es un proyecto que busca ser una plataforma que apoye a artistas que viven y trabajan desde la periferia de las grandes ciudades. Fue concebida para ser un espacio digital que tuviera participaciones en ferias de arte y exposiciones colectivas, generando vínculos entre el público y los artistas”.
El diseñador y curador explicó que muchos de estos creadores han sido invisibilizados y puestos al margen de los discursos museísticos, excluyendo obras y propuestas muy interesantes, que pueden ofrecernos otras visiones del mundo y de lo que está pasando en esos lugares, muchos de ellos azolados por la violencia, las drogas y otras problemáticas.
De la chinería a lo kitsch
“Pienso que el arte y las manifestaciones que se desarrollan en estas zonas son muy interesantes, porque lo hacen con conocimiento de causa, y de alguna manera existe una denuncia, una necesidad de quererse hacerse notar y mostrar que el arte no solo es para las grandes élites”, explicó el entrevistado.
Una de las cuestiones más importantes es desestigmatizar a los habitantes de esos lugares, empezar a romper esos paradigmas y entender de dónde vienen estos artistas, cuáles son los contextos que los envuelven y qué nos quieren decir; lo que permitirá tener una mayor compresión de nuestra realidad.
“Hacer visibles a estos artistas también nos abre otro tipo de panoramas; creo que ahora debemos de ver de qué maneras las minorías o las personas que estamos fuera o al margen de lo que llaman la centralidad nos vamos desenvolviendo; la línea de la galería se adapta al arte político, de denuncia y el kitsch“.
Esto se puede ver en las piezas que integrar la muestra “Transeúnte. Hacía una nueva normalidad”, con la que el pasado 2 de junio inauguraron el proyecto y que reúne el trabajo de los artistas plásticos Sonia Madrigal, Eric Muñoz, Itzamna Reyes, Gabriela Sandoval y Alfonso Zárate.
Explicó que él fue curador de la muestra, a la que acompaña un texto de Carlos Rojas, la cual fue concebida en su totalidad para Instagram y en la que el público podrá disfrutar de las obras mediante cápsulas de video y una selección de imágenes, que dan cuenta de la manera en que la pandemia del COVID-19 se relaciona con el proceso creativo.
Paredes invitó a acercarse a este espacio virtual, conocer las propuestas y abrirse a las miradas de nóveles creadores, quienes participan en una serie de charlas que se realizan hasta el 21 de junio a las 19:00 horas a través de las redes sociales de la galería.