Han pasado cinco meses desde que, el pasado mes de marzo, Harry y Meghan acudieran a su último acto como miembros de la corona inglesa. Un tiempo en el que las aguas que comenzaron a revolverse con la llegada de la actriz a la vida del príncipe no solo no han vuelto a su cauce sino que han seguido agitándose sin que la posiblidad de una calma relativa parezca cercana. Y menos después de la publicación de ‘Finding Freedom’, el libro sobre la pareja que ha salido hoy y cuyos detalles son tan privados que el matrimonio ha tenido que tomar la palabra para asegurar que ellos no han colaborado de ninguna manera con los autores de las páginas que cuentan su vida.
Si hay alguien interesado en que el libro no saliera a la luz esos han sido, sin duda, los Duques de Cambridge. El matrimonio formado por Kate Middleton y el príncipe Guillermo, que prometía ser el gran apoyo de la pareja formada por Meghan y Harry, se convirtió no solo en una complicación más para el hijo pequeño de Lady Di sino en la gran decepción de su vida. Al parecer a Guillermo no le hacía gracia lo «rápido que iba todo con Meghan» y aconsejó a su hermano que «se tomase el tiempo que hiciera falta para conocerla en profundidad», un consejo que sentó muy mal al príncipe, que no encontró en su hermano el apoyo que esperaba. Con el compromiso, la boda, la mudanza al palacio de Kensington y la división de lo que era conocido como ‘Los cuatro fantásticos’ las cosas no hicieron más que empeorar y cada problema terminaba reflejado en los tabloides británicos.
Cuenta el libro que el hecho de que cada desencuentro terminase haciéndose público era una de las cosas que más molestaba a Harry: «Harry estaba molesto porque todo se estaba desarrollando de forma muy pública y porque gran parte de la información que se estaba divulgando era incorrecta. Hubo momentos en los que sospechó que las personas que trabajaban con su hermano estaban filtrando cosas para dejar bien a Guillermo, aunque eso significara arrojar a Harry debajo de un autobús. Fue un momento confuso; no sabía a quién ni qué creer, y él y Guillermo no hablaban demasiado, lo que lo empeoró todo».
Pero ¿qué pasa con Kate Middleton? la escasa o nula relación entre la duquesa de Cambridge y la de Sussex ha sido otro de los asuntos a tratar en las páginas de ‘Finding Freedom’. Al parecer el desencuentro entre ambas parejas vivió uno de sus momentos más tensos en el Día de la Commonwealth, el último compromiso público de los Sussex. Tal y cómo se pudo ver en las imágenes del acto, Harry y Meghan saludaron a Guillermo y Kate con sonrisas, pero ellos «apenas los miraron», lo que se tradujo en que los padres de Archie abandonaran el evento profundamente «dolidos». Según el libro, Kate evitó el contacto visual con Meghan y Guillermo simplemente le hizo un gesto con la cabeza a Harry. Después del servicio, Meghan reservó el primer vuelo a Canadá y dejó el Reino Unido «emocionalmente rota y exhausta».