La crisis sanitaria del coronavirus también afecta a los ‘royals’, en este caso, a la Familia Real noruega que el próximo 5 de septiembre verá menguada considerablemente la celebración de la confirmación de Sverre Magnus. Todo porque las restricciones sanitarias y los distintos protocolos de cuarentena que rigen cada país han obligado a cancelar la presencia de los miembros de la realeza europea. Hace una semana que la Casa Real noruega anunciaba la confirmación como miembro de la Iglesia Luterana del hijo menor del Príncipe Haakon y Mette Marit, una cita muy importante para Sverre Magnus, que finalmente no será como se esperaba.
La amplia lista de invitados ha comenzado a tener las cancelaciones pertinentes de todos aquellos que residen fuera del país nórdico. Sverre Magnus solo podrá contar, en esta fecha tan señalada para él, con familiares que residan en su mismo país. Según da por hecho la prensa noruega, quienes fueran sus padrinos de bautismo, la Reina Máxima de Holanda, Pablo de Grecia y Rosario Nadal, serán los grandes ausentes del evento. Los tres fueron testigos del bautizo del joven y, desafortunadamente, no podrán ejercer ese mismo papel en el día de la confirmación de su ahijado. La crisis sanitaria ‘manda’ y afecta a todos por igual.
Quienes sí podrán estar presentes en la iglesia de Asker serán sus padrinos de bautismo noruegos: su abuela la Reina Sonia, el hermano de Mette Marit, Espen Høiby; además de Bjørn Steinsland y Marianne Gjellestad, amigos personales de sus padres. Hasta 17 invitados es el límite ‘impuesto’ a las familias de los confirmantes, que contarán con este reducido número de allegados en la celebración luterana. La celebración será más parecida a la que tuvo en su día su hermano mayor, Marius Borg, que igualmente se confirmó en el mismo lugar a las afueras de Oslo junto con los compañeros con los que recibió su formación. El próximo 5 de septiembre, y tras la ceremonia, se ofrecerá un ágape en la residencia familia donde también se celebró su bautizo el 4 de marzo de 2006.
Nada que ver con la confirmación de su hermana Ingrid Alexandra que, debido a su condición de heredera, disfrutó de un día con más solemnidad. De hecho, la confirmación tuvo lugar en la capilla del Palacio Real de Oslo y entre los más de cien invitados, sí estuvieron sus padrinos de bautismo, entre ellos el ahora Rey Felipe VI, Federico de Dinamarca y Victoria de Suecia.