Han pasado cinco meses de que se decretara el estado de alarma debido a la grave crisis sanitaria que nos tuvo durante tres meses confinados en casa. Con la llegada del buen tiempo y la desescalada las vacaciones han sido el punto de partida de un nuevo repunte de casos de COVID-19, que están volviendo a despertar las alarmas y por ende la incertidumbre y la ansiedad por lo que va a pasar. Y precisamente las vacaciones nada típicas tras el confinamiento, pasan por continuar en casa o por optar por quedarse en la Comunidad Autónoma en la que se reside. Y es que cualquier precaución sigue siendo poca, aunque siguiendo las recomendaciones de los expertos, se puede disfrutar de unos días de descanso pero siempre llevando mascarilla, teniendo una higiene de manos adecuada y guardando la distancia social.
Pero hay que desconectar y se puede hacer de verdad. Es necesaria tanto a nivel físico como a nivel mental como así lo explican los especialistas que además inciden en que, aunque lo óptimo sería tener 15 días de vacaciones, en esta ‘nueva normalidad’ prima más la calidad que la cantidad. Si ya de por sí es imprescindible romper con la rutina, después de haber vivido una situación que ha dado un giro radical a nuestra vida, en la que el estrés y la ansiedad han entrado a formar parte de nuestra rutina, la ‘obligación’ y la necesidad de hacer una desconexión es primordial.
Haber pasado más de tres meses encerrados en el mismo lugar, muchos incluso teletrabajando y practicando el ‘homeschooling’ han hecho del hogar una oficina y también un colegio, por lo que la necesidad de ‘escapar’ de allí es algo inevitable. Pero hay quien no tiene la tranquilidad suficiente como para disfrutar de unas vacaciones al uso, algo también impensable con las noticias que hablan de un posible nuevo repunte de la pandemia.
Así que, tanto si has elegido quedarte en casa, viajar a la costa o varias horas de distancia de tu domicilio, toma nota de estos trucos para evadirte de verdad.
Limita lo digital
Internet al alcance de cualquiera ha hecho que se haya ‘sufrido’ un bombardeo constante de noticias que han llegado a suponer un efecto negativo durante la pandemia. Así que, como dicen los expertos, hay que desconectar para conectar, y no hay mejor manera de hacerlo que olvidándose de ordenadores, tabletas y móviles.
Relájate y controla la incertidumbre
La incertidumbre llegó en marzo para quedarse, al menos de momento. ¿Qué ocurrirá con el trabajo?¿Cómo va a ser la vuelta al colegio?¿Se dará con el fin del coronavirus?, estas son algunas de las preguntas que avivan aún más la ansiedad. Para desconectar es importante dejarlas en un segundo plano, relajarse practicando yoga o cualquier otra modalidad de ejercicio.
Haz cambios en casa
Es tu casa, pero ha sido tu lugar de trabajo y, si tienes niños, también ha sido un aula. Pasado el confinamiento, y si has preferido disfrutar de tus vacaciones en tu domicilio, una buena manera de desconectar es cambiando el interior de tu vivienda. Y no hace falta realizar una gran inversión: pinta las habitaciones, recicla muebles, cambia las fundas de los cojines, cualquier pequeño cambio será muy beneficioso.
Elige un lugar tranquilo
Para desconectar, qué mejor que un lugar que te inspire paz. Puede ser un pueblo dentro de tu Comunidad, una casa rural o un lugar de playa. Pero ahora, fíjate destinos reales y no un imposible. No hace falta viajar a cientos de kilómetros, puedes visitar un pueblo cercano a tu lugar de residencia, hacer una escapada al campo o pasar una jornada en el mismo sitio en el que estés de vacaciones. Eso sí, siempre siguiendo las recomendaciones de las autoridades.
Disfruta de tu familia
Si has pasado el confinamiento lejos de los tuyos, las vacaciones son el mejor momento para disfrutar de la familia y los amigos. Y si has pasado la cuarentena con ellos, quizá no les hayas prestado atención debido al teletrabajo o a la angustia producida por la situación. Ahora es un buen momento para convivir de una manera diferente, con sentido del humor, y sacándole el máximo partido a cada minuto con ellos.
Planes con niños
Ver la vida con ojos de niño es una buena manera de desconectar. Planifica actividades con ellos, comparte sus inquietudes y sus juegos, es una muy buena manera de evadirte y de disfrutar de ellos. Propón escapadas en el lugar donde estéis de vacaciones, un picnic, una sesión de cine diferente y enséñales juegos de tu infancia.
Viajes gastronómicos
Aunque el confinamiento ha supuesto un aumento de kilos en un gran número de personas, las vacaciones son un buen momento para viajar gracias a la gastronomía. Cocinar menús típicos de otros países, aprender recetas del lugar en el que estés de vacaciones, es otra propuesta para disfrutar de las vacaciones.