Así lo denunció Víctor Fuentes, impulsor y defensor comunitario del medio ambiente, quien dijo que se desconocen las causas de este hecho; ‘lo hicimos para seguir dándonos esperanza a un año del devastador sismo de magnitud 8.2 y que permanece el dolor en nuestra memoria colectiva’, dijo.
Por Diana Manzo
Unión Hidalgo, Oax.- El árbol “Memorial del 7 de septiembre”, sembrado en 2018 como esperanza colectiva de los sobrevivientes del sismo de 8.2 grados -el más grande que se haya sentido en México en el ultimo siglo-, fue talado por la autoridad municipal de Unión Hidalgo que encabeza César Carrasco Vicente, denunció Víctor Fuentes, impulsor y defensor comunitario del medio ambiente.
El pochote o la ceiba fue sembrado en el parque central de esta localidad por niños, padres de familia y profesores de la Escuela Primaria “Hermanos Flores Magón” a iniciativa del profesor Víctor Fuentes, quien en ese entonces era el director de la institución.
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“Adiós árbol, adiós ceiba, adiós pochote, adiós, ya’ axche, infinito adiós al Bioongo. Han pasado, desde el 7 de septiembre de 2018, al 7 de septiembre de 2020, dos años, que significan memoria y alegría por la vida para quienes participamos en la siembra del pochote. Lo hicimos para seguir dándonos esperanza a un año del devastador sismo de magnitud 8.2 y que permanece el dolor en nuestra memoria colectiva”, explicó Víctor Fuentes.
Agregó que la noticia le cayó “como un balde de agua fría” porque los que participaron en la siembra del pochote siempre procuraron el cuidado, además precisó que en México desde 1954 por decreto existe “El día del árbol”, con la intención de sensibilizar a la ciudadanía el respeto y protección de especies en peligro de extinción.
“Cuando lo sembramos llegaron los niños, todo fue alegría, inclusive un cantautor paisano llamado Che Dro, entonó con su guitarra y su voz el himno de nuestro pueblo llamado “Ranchu Gubiña”, y mira ahora lo talaron desde la raíz, eso nos duele mucho, porque era un acto memorial colectivo”.
Víctor Fuentes señaló que la ceiba es un árbol sagrado entre los mayas y de todo Mesoamérica, por eso se eligió para que fuera el memorial y por eso “duele” su derribo.
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“En Japón cuna del haiku, es una muestra de alta sensibilidad que se mantiene vigente, con esta expresión poética que lleva de esencia al asombro y respeto a la naturaleza, y en nuestra propia cultura zapoteca el árbol fue conocido por nuestros binni gula’sa’ como bioongo (ceiba). Quienes le atribuyeron el origen y creación de todo, como centro de la tierra y representa uno de los cuatro árboles que equidistan los puntos orientadores de la vida y la muerte del día y la noche”, indicó.
Finalmente, dijo que “talar por talar”, como ha ocurrido, le parece una falta de respeto, cuidado e ignorancia de lo que ocurre a nivel comunidad. “Es una muestra de la indiferencia y desatino para gobernar y tolerar los intereses de los pobladores, es una irresponsabilidad no enterarse porqué una ceiba está en el centro de la población”.
Al respecto la autoridad municipal el pasado 7 septiembre colocó una ofrenda floral en memoria de las personas que perdieron la vida, pero en ningún momento explicó el motivo de la tala al árbol “Memorial del 7 de septiembre”.
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