La primera jornada de la Fashion Week Madrid ha contado con Begoña Gómez como invitada de excepción. La mujer del Presidente del Gobierno ha querido mostrar su apoyo públicamente a la industria de la moda, uno de los sectores más castigados por la crisis del coronavirus. Pero su presencia no ha pasado desapercibida, especialmente, porque no ha encontrado mejor momento para estrenar su cambio de imagen y presumir de figura con un outfit rompedor. Se trata de la primera aparición pública de la esposa de Pedro Sánchez, después de ser una de las mujeres que encabezaron la manifestación feminista del 8 de marzo. Tras un duro confinamiento en el que dio positivo en COVID, Begoña ha comenzado ‘el curso’ de la mejor manera posible.
Y lo ha hecho asistiendo junto al ministro de Cultura, José Luis Rodríguez Uribes, al desfile de la firma Devota & Lomba que presentaba su colección Edén, y que ha disfrutado en el front row junto a Ágatha Ruiz de la Prada, y otras invitadas de la talla de la ex Miss España Vania Millán. A su llegada Begoña Gómez ha sorprendido a todos con su nueva imagen capilar. Aunque mantiene la largura de su melena, le ha dado luz en las puntas con unos reflejos, ha cortado su flequillo y le ha dado movimiento con unas ondas rotas.
Pero además de su pelo, la ‘primera dama’ ha impactado con el outfit elegido para acudir a la Fashion Week Madrid de esta ‘nueva normalidad’. Su apuesta ha sido a caballo ganador con un sencillo look en blanco y negro, incluyendo mascarilla, y formado por un vestido lady negro de corte midi con escote en pico y falda plisada, que ha combinado a la perfección con unos llamativos botines blancos. Begoña Gómez ha dejado claro que es una fiel seguidora de las tendencias, además de sabedora de tener un buen fondo de armario plagado de básicos. Y es que el vestido, en color negro y largo midi, ha desbancado al menos esta temporada, al mítico little black dress.
El uso de la mascarilla, que Begoña ha lucido en color blanco con el colorido logotipo de las metas de desarrollo sostenible de Naciones Unidas , ha hecho que su maquillaje estuviera centrado en los ojos. Con sombras ahumadas oscuras y un delineado negro tanto en el párpado superior como en la línea del agua ha conseguido realzar su mirada, además de su envidiable bronceado, conseguido durante sus vacaciones familiares en Almería y Lanzarote.