BOGOTÁ – El abogado Javier Ordóñez, de 46 años edad, murió en un clínica de Bogotá luego de que varios policías lo sometieran con descargas de pistolas eléctricas taser, hecho que causó indignación y fue condenado por la alcaldesa de Bogotá, Claudia López.
Según medios locales el hecho ocurrió la madrugada de este miércoles en el barrio Santa Cecilia cuando la Policía detuvo a Ordóñez por supuestamente consumir licor en la calle junto a otras personas.
En videos de redes sociales se ve cuando dos policías someten por la fuerza al hombre y le aplican descargas eléctricas pese a las voces de protesta de vecinos que consideraban que había abusos porque el hombre ya estaba en el piso y decía “ya, por favor, déjenme tranquilo, por favor”.
Los patrulleros condujeron a Ordóñez y a otras personas a un Comando de Acción Inmediata (CAI) en donde éste presentó problemas de salud y fue llevado a clínica a la que llegó sin signos vitales.
“Hoy amanecemos con una noticia que nos entristece y nos indigna. Un caso de abuso policial en la localidad de Engativá, a un ciudadano de 46 años, Javier Ordóñez, le mandamos nuestro abrazo, nuestra solidaridad y condolencia”, dijo la alcaldesa López.
La mandataria aseguró que “el abuso policial es absolutamente inaceptable, lo que legitima la actuación de una autoridad es que ejerza su autoridad de manera legítima sin ningún tipo de abuso”.
La Patrulla Fronteriza ha confirmado que este video fue tomado en un Burger King de la calle Paisano en El Paso, Texas y no se trata de una redada. Por el contrario, la agencio informó que, de acuerdo a récords, el hombre arrestado se encontraba en el país de manera indocumentada y contaba con un historial criminal.
Añadió que que a través de un video de la ciudadanía “se ve que hay un ciudadano en estado de alicoramiento, en estado alterado, que agredió a la Policía, que ya había sido controlado y que lo único que estaba pidiendo era que no lo agredieran más, que no lo atacaran más con esa táser, (pero) le siguen y le siguen metiendo esa táser y además se lo llevan a un CAI, no hay una explicación clara y el ciudadano termina falleciendo en un hospital de Bogotá”.
Por su lado el secretario de Gobierno, Luis Ernesto Gómez, escribió el Twitter que “este procedimiento evidencia un claro uso excesivo de la fuerza y es una clara violación de derechos humanos”.
El coronel Alexander Amaya, comandante operativo de Seguridad Ciudadana de la policía, dijo a periodistas que acudieron al lugar porque la comunidad alertó sobre una riña.
“Se llama al cuadrante, que se desplaza en un lugar aquí de la localidad de Engativá por una presunta riña que se está llevando a cabo”.
Explicó que “al llegar, hay alrededor de ocho personas que están discutiendo, todo parece indicar que con ingesta bebidas embriagantes. Se les pide el favor, se trata de disuadir, pero se vuelven agresivas contra la Policía”.
Ante la situación “la Policía debe someterlas y unas personas son conducidas hasta el CAI. Una presenta molestias en su salud física y de inmediato es trasladada al centro médico más cercano. Lastimosamente llega sin signos vitales”.