Junts per Catalunya, el partido del expresident Carles Puigdemont, aprobó hace una semana una ponencia política que consagra la “confrontación inteligente” para lograr la independencia. La doctora en Economía por la Universidad de Harvard Elsa Artadi (Barcelona, 44 años) es la vicepresidenta de la formación y su portavoz. También es concejal en Barcelona y diputada en el Parlament. Descarta ser candidata a la Generalitat y dice que buscará desbancar a Ada Colau en 2023.
Pregunta. Abogan por la confrontación inteligente. ¿Qué es?
Respuesta. Hay dos partes en esta expresión. Confrontación, que no la hemos elegido nosotros, siempre hemos apostado por negociar. Sabemos que eso ya no tiene recorrido y que para el Estado español el tablero de juego es la represión. Ante eso escogemos no aplanarnos ni abandonar el proceso independentista y optamos por la inteligencia. Es decir, buscar las grietas que permitan hacer más débil al Estado.
P. ¿Por ejemplo?
R. El 1-O. El Estado nos dice que ni diálogo ni negociación. Si ellos no quieren, entonces nosotros hacemos el referéndum. Eso tuvo consecuencias muy duras, pero es inteligente en tanto que pones al Estado ante dos escenarios malos para él: o dejarnos hacer, como en el 9-N, o tener las imágenes de policías reventando escuelas.
P. Cuesta entender que en la peor crisis se hable de debilitar.
R. Denunciamos un poder judicial que ataca sistemáticamente a la democracia, la salud, que interviene decisiones de los Gobiernos autónomos. Vamos a Europa a mostrar la vulneración de libertades. Eso no es incompatible, al contrario, con servir a la ciudadanía de la mejor manera posible.
P. ¿Irán a la reunión con la presidenta de la Comisión Europea?
R. Si viene a hablar del reparto de los fondos de recuperación, evidentemente. Vamos adonde vemos que es útil. Quim Torra fue a todas las reuniones de presidentes autonómicos, fue el primero en aportar soluciones y liderar el debate. La única que rechazó fue el folclore de La Rioja de todos con el Rey para tapar la huida de su padre corrupto. Ante nuestra actitud propositiva encontramos a un Pedro Sánchez recentralizador, parado y cobarde.
P. ¿Sánchez y Pablo Iglesias en el mismo plano? Ellos se ocuparán de los fondos europeos.
R. En Madrid, Podemos no pinta nada como en Barcelona los socialistas no pintan nada. Iglesias es a Sánchez lo que Jaume Collboni es a Ada Colau. Hay un tic recentralizador. España podría decidir quién hace la gestión, qué rol le da a los territorios y no lo hace. Ya veremos qué hace Alemania.
P. A Cataluña sola no le ha ido mucho mejor en su lucha contra la pandemia.
R. Discrepo. Cataluña se anticipó, tomó decisiones valientes y difíciles en el verano. Ahora lo que vemos es una Comunidad de Madrid opuesta a tomar cualquier decisión y a un Gobierno paralizado. Si eso lo estuviera haciendo Torra, tendríamos ya el 155.
P. ¿Denunciar la represión abocando a Cataluña a meses de interinidad no impide una buena gestión o tener unos Presupuestos?
R. No hemos sido nosotros los que hemos inhabilitado a un president en plena pandemia. Se me haría muy difícil defender que toca callar ante los represaliados o hablar solo de lo que se come.
P. ¿Las peleas con ERC minan la credibilidad a un nuevo pacto?
R. Tenemos que trabajar para que no se traslade a batallas públicas pero es normal que haya proyectos diferentes y legítima confrontación de ideas. Nosotros hemos sido claros, y no es el caso de ERC, de que queremos un gobierno nítidamente independentista.
P. ¿Se entiende que Junts siga en el Gobierno de la Diputación de Barcelona con los socialistas?
R. La Diputación es una gestoría que reparte dinero a los ayuntamientos, que son los que hacen la política. No marca el ritmo. Consideramos que era mejor estar a que ERC nos expulsara.
P. Con el 47% fracasaron en la búsqueda de la independencia, con un alto coste. ¿Lo volverán a intentar con el 50,1%?
R. Para mí el 1-O es un éxito colectivo. Emplazamos a que ese 50% de voto independentista en las próximas elecciones sirva para algo. Por ejemplo, para anular el discurso de que no somos mayoría. Aprovechemos estas elecciones para decidir entre todos dónde estamos y lograr una estrategia común.
P. ¿Irán a la mesa de diálogo?
R. Creemos que debe ser de negociación. Las charlas, en el bar. Negociaremos lo que creamos que realmente ayude; por ejemplo, la reforma del Consejo General del Poder Judicial. Es una medida concreta que ayuda a acabar con estructuras antidemocráticas y franquistas. Creo que contra Lesmes somos muchos.
P. ¿Y los Presupuestos?
R. Estudiaremos la propuesta. ¿Seguirá el expolio fiscal? Garantías sí, cheques en blancos no.
P. Pero estamos ante un contexto extraodinario por la covid.
R. Se tomarán las decisiones en función de si benefician o no a la ciudadanía catalana. No nos comeremos titulares de 800.000 puestos de trabajo. El PSOE saca el mismo cartel en cada crisis.
P. ¿El candidato a presidir la Generalitat será Puigdemont?
R. Eso espero. Es el mejor político que de largo tiene este país.
P. ¿Optará por ser número dos efectivo de la candidatura?
R. Me presentaré a las primarias de 2023 para la alcaldía. Barcelona está en la peor crisis y con el peor gobierno posible.
Source link