Afirmó que su administración no autorizará un nuevo aislamiento nacional, aunque dijo no saber qué pasará en el futuro porque “nadie sabe qué administración será”.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró que espera que una vacuna contra el coronavirus esté disponible para toda la población a partir de abril, en medio de una avalancha de nuevas infecciones de la enfermedad mortal que ha llevado el recuento diario de casos a niveles récord.
En su primera conferencia de prensa en más de una semana, después de su derrota electoral ante el demócrata Joe Biden, Trump también dijo que espera una autorización de uso de emergencia para la vacuna de Pfizer “extremadamente pronto”.
Días atrás Pfizer anunció que espera brindar los detalles sobre la seguridad de su vacuna candidata la próxima semana. Será entonces que la administración de Trump solicite una autorización de uso de emergencia.
El reporte del presidente se ofreció luego de recibir una actualización del Operativo Máxima Velocidad (Operation Warp Speed), un esfuerzo de la administración de Trump para acelerar el desarrollo de una vacuna, y la producción de medicamentos e insumos médicos requeridos para hacer frente a la pandemia de coronavirus.
“Ningún avance médico de esta magnitud se había logrado antes de manera tan rápida, y estamos muy orgullosos de las Fuerzas Armadas por su ayuda, de los generales y almirantes, así como de grandes personas en la Casa Blanca”, sostuvo Trump durante su anuncio realizado en la Casa Blanca.
El mandatario afirmó que el periodo regular para el desarrollo y producción de una vacuna puede tomar entre ocho y 10 años, pero su gobierno lo logró en menos de un año.
“Si tuvieran otro gobierno, con otras personas a cargo, hubieran tardado tres, cuatro o cinco años, en mi opinión”, declaró.
Trump aseveró que su distribución será muy rápida. “Estamos listos para hacerlo”, dijo, y explicó que se dará prioridad a los trabajadores de primera línea, a los adultos mayores y estadounidenses en condiciones de alto riesgo, debido a que “el 99.9 por ciento de las personas contagiadas menores de 50 años se recuperan completa y rápidamente”.
Sin embargo, reconoció que los números de casos detectados en su país son altos, lo atribuyó a que tienen “el mejor programa de pruebas (de coronavirus) en todo el mundo”.
Sobre la distribución de la vacuna, Trump dijo que tendrá un alcance nacional, excepto en el estado de Nueva York, ya que su gobernador ha decidido “tomarse su tiempo con la vacuna, ya que no confía en su procedencia”. Esto -afirmó Trump- “por motivos políticos”.
Con respecto a la economía, afirmó que “está recuperándose de una manera mucho más ágil de lo que se había pensado”, así como la recuperación de empleos, ya que durante el mes pasado 13 millones de personas fueron contratadas, reduciendo a la mitad la tasa de desempleo.
El presidente afirmó que su administración no autorizará un nuevo aislamiento nacional, ya que el pasado costó 50 millones de dólares al día y cientos de miles de empleos, y “la cura no debe de ser peor que el problema”.
“Espero que, cualquier cosa que suceda en el futuro, nadie sabe qué administración será, supongo que el tiempo lo dirá, pero les puedo decir que esta administración no tendrá otro aislamiento”, expuso.
Finalmente, pidió a todos los estadounidenses seguir vigilantes, sobre todo con la llegada del frío invernal.
Con información de Reuters