El presidente podrá ser juzgado por traición a la patria, corrupción, delitos electorales o cualquier otro por el que pueda ser juzgado un ciudadano.
Con 89 votos a favor y 23 en contra, el pleno del Senado avaló la eliminación del fuero presidencial, una iniciativa del presidente Andrés Manuel López Obrador presentada por primera ocasión en diciembre de 2018.
Con la aprobación de la reforma constitucional se instituye que al jefe del Ejecutivo se le podrá retirar el fuero por traición a la patria, corrupción, delitos electorales o cualquier otro por el que pueda ser juzgado un ciudadano.
Al tratarse de una reforma constitucional la minuta aprobada a los Congresos de los estados, y requiere del aval de -al menos- 17 Congresos locales para entrar en vigor.
Durante la discusión, la senadora por Morena, Bertha Caraveo, destacó la importancia de someter a los exmandatarios a procesos de rendición de cuentas y de justicia por los actos cometidos durante sus sexenios, y señaló de manera directa a los expresidente Enrique Peña Nieto y Felipe Calderón.
“Nunca más un jefe de una asociación delictiva como Enrique Peña Nieto, tenga fuero constitucional ante tales fechorías. Por otro lado Felipe Calderón tampoco se salva, Incendio a nuestro país en una terrible guerra contra la violencia de la cual todavía sufrimos consecuencias. La comisión bajo su orden de crímenes de lesa humanidad fue documentada, las desapariciones y el derramamiento de sangre aún retumban”, sostuvo.
Por su parte, la senadora panista Xóchitl Gálvez calificó como “una verdad a medias” la eliminación del fuero presidencial.
“Es importante que los mexicanos sepan que lo que hoy estamos haciendo es ampliarle delitos al presidente por los que puede ser juzgado, pero definitivamente no le estamos quitando el fuero”, expresó.