Grifos de lavabo de baño tenderá a machacarse con los años de uso, especialmente en áreas de agua dura donde es probable que se formen incrustaciones de cal. Los grifos pueden volverse menos efectivos y el agua puede verse obstaculizada por acumulaciones en las tuberías. Limpiar el exterior de los grifos no es un problema a menos que la cal esté espesa. Por dentro, es mucho más complicado de alcanzar. El uso de productos químicos agresivos para limpiar los grifos no es la idea de que todos sean respetuosos con el medio ambiente, por lo que el uso de artículos domésticos es más seguro y fácil.
Paso 1: quitar el grifo
Es mejor quitar el grifo que intentar limpiarlo mientras aún está conectado. Cierre el suministro de agua debajo del fregadero, usando la válvula aislante. Busque debajo del fregadero y afloje, luego retire las tuercas de sujeción para liberar el grifo. Retire todo el conjunto del grifo y colóquelo boca abajo.
Paso 2 – Cristales
Coloque el grifo en un bol. Gire el grifo de modo que los orificios de salida queden hacia arriba. Vierta cristales de refresco en los orificios de salida hasta que estén llenos y vierta agua hirviendo. Deje que los cristales se disuelvan lentamente dentro del grifo. Después de aproximadamente quince minutos, vierta más agua hirviendo. Notarás que la primera cantidad de agua que vertiste tardó un poco en salir por el otro lado. La segunda cantidad debería ser mucho más rápida. También notará cristales de residuos y escamas de cal que salen en el agua a medida que sale. Vierta más agua hirviendo en el grifo hasta que todos los cristales se hayan disuelto.
Paso 3: cepillado
Use un cepillo de alambre para tubos para limpiar los residuos dentro del grifo. Un cepillo de alambre para tubos es un cepillo de forma cilíndrica con cerdas de alambre firmes y un mango de alambre duro. El cepillo encajará perfectamente en el interior del grifo para limpiar el limo o la cal que queda. Empuje el cepillo con firmeza en los orificios del grifo. Sea rápido con el cepillo y muévalo hacia adelante y hacia atrás dentro de la tubería del grifo para asegurarse de que se eliminen todas las incrustaciones.
Paso 4 – Enjuague
Use agua hirviendo nuevamente y viértala en las tuberías del grifo para enjuagar cualquier residuo que haya limpiado. Llena el recipiente con agua tibia limpia y agita el grifo para enjuagarlo. Use vinagre blanco en un paño limpio y seco y pula el exterior del grifo para que brille.
Paso 5 – Reemplazo
Limpie el área donde se colocó el grifo en la parte superior del fregadero. Vuelva a colocar las tuberías del grifo en los orificios y vuelva a apretar las tuercas de sujeción con la llave ajustable. Vuelva a abrir el agua y pruebe el flujo de agua del grifo. Sus grifos ahora deberían fluir mucho mejor y más fácilmente. Deje correr el agua por un tiempo para limpiar las tuberías y cualquier resto de escombros.