La empresa reporta “la suspensión total de los procesos de la planta (de Etileno XXI), con las consecuentes y negativas repercusiones”, por lo que anuncia que tomará acciones.
El Centro Nacional de Control del Gas Natural (Cenagas) informó el pasado 30 de noviembre a Braskem Idesa que no renovaría el Contrato de Servicios de Transporte en Base Firme para el transporte de gas natural a su planta Etileno XXI, ubicada en Veracruz, lo cual rechazó la empresa y adelantó que tomará acciones.
De acuerdo con un comunicado, “también bloqueó el ingreso de gas el día siguiente, en desapego al contrato de base interrumpible con el contrato en vigencia y sin llevar en cuenta la solicitud de Braskem Idesa de mantener 48 horas de suministro reducido para hacer un paro de sus operaciones de forma segura para las personas, vecinos y el medio ambiente”.
“Las acciones de Cenagas han causado la suspensión total de los procesos de la planta (Etileno XXI), con las consecuentes y negativas repercusiones no sólo para nosotros, la planta, nuestros clientes, proveedores y empleados, sino también para los cientos de negocios que dependen de la cadena de valor, afectando a la petroquímica nacional y la economía en su conjunto”, indicó Braskem Idesa.
La empresa sostuvo que esta decisión “viola nuestros derechos incluyendo múltiples disposiciones jurídicas vigentes”:
Y aseguró que “su conducta siempre ha sido apegada a la legalidad y al marco jurídico de nuestro país y que su proceder cotidiano ha sido conforme a las normas y prácticas más exigentes internacionalmente”.
“Hemos manifestado reiteradamente nuestra disposición a discutir con la autoridad los temas que hoy manifiestan en relación con la operación de Braskem Idesa y sus contratos con las empresas del Estado mexicano, llevando propuestas de soluciones”, indicó.
“Pedimos que el Estado de Derecho y el respeto a la ley, compromisos expresados por esta administración, guíen esta controversia y permitan rectificar las decisiones tomadas por el Cenagas que es una afronta a, entre otras cosas, la seguridad de las operaciones”, apuntó.
Adelantó a la comunidad financiera nacional e internacional, a sus clientes, proveedores, empleados y colaboradores, que “en cumplimiento de sus responsabilidades fiduciarias y corporativas, debe tomar las acciones que existan en el marco de la ley para la defensa de su derecho y patrimonio”.
Ayer, el presidente Andrés Manuel López Obrador informó que se terminó el contrato, sin opción a renovarse, debido a que ofrecía condiciones ventajosas para la empresa, además de ser perjudicial para la Hacienda Pública y para Pemex, pues se le vendía el gas a precios por debajo del mercado: