El presidente electo Joe Biden pedirá a todos los estadounidenses, cuando llegue a la Casa Blanca el próximo 20 de enero, que lleven mascarilla durante 100 días. Así lo ha asegurado el futuro presidente demócrata, en una entrevista junto con la futura vicepresidenta, Kamala Harris, en la CNN. “Serán solo 100 días, no para siempre”, ha aclarado. “Y creo que veremos una reducción significativa”, agregó.
Biden ha explicado que, allí donde tenga autoridad, ya sean propiedades federales, aviones o transporte interestatal, decretará órdenes que obliguen a llevar máscaras durante esos 100 días. Las diferencias con el presidente saliente Trump en su enfoque hacia la crisis sanitaria han quedado marcadas, de manera muy clara, en la entrevista de Biden y Harris con el presentador Jake Tapper, celebrada en Wilmington (Delaware), la primera que realizan desde que ganaron las elecciones del pasado 3 de noviembre.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, en línea con el consenso científico, vienen defendiendo que cubrirse la nariz y la boca con una máscara adecuada contribuye de manera decisiva a protegerse a uno mismo y a los demás frente al contagio. Pero el presidente Trump ha hecho gala, con alguna excepción, de no llevar máscara en público, e incluso, durante la campaña, se mofó de su rival por llevarla.
Biden también ha asegurado en la entrevista que mantendrá en el equipo de respuesta a la crisis del coronavirus al doctor Anthony Fauci, prestigioso epidemiólogo que ha sido el rostro de la ciencia durante la crisis. Fauci ha exhibido un prodigioso equilibrio en su esfuerzo por defender y difundir el consenso científico sin enfrentarse abiertamente con la Administración de Trump, para la que sigue trabajando. El presidente le ha criticado en más de una ocasión y su figura era objeto de ataques en los mítines del republicano.
“Le he pedido que se mantenga exactamente en el mismo papel que ha desempeñado con anteriores presidentes”, ha dicho Biden de Fauci, “y le he pedido que sea también mi consejero médico jefe y parte del equipo del covid”. De hecho, el presidente electo ha explicado que su jefe de Gabinete, Ron Klain, conoce bien a Fauci y ambos han estado hablando “todo el tiempo”.
Respecto a la vacuna, Biden ha asegurado que estará “feliz de ponérsela” una vez que Fauci haya dicho que es segura, y que la misma le será administrada en público. “En ese momento me colocaré ante el público y me la pondré”, ha explicado. “La gente ha perdido la fe en que la vacuna funcione. Las cifras [de cuánta gente está dispuesta a ponérsela en EE UU, según las encuestas] ya son tan asombrosamente bajas, que importa lo que el presidente y la vicepresidenta hagan”. Su anuncio coincide con el de los expresidentes Barack Obama, George W. Bush y Bill Clinton, que también este jueves han asegurado que se pondrán la vacuna ante las cámaras de televisión para favorecer la confianza del público en la seguridad y garantía de la vacuna.
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