“La priorización debería ser a adultos mayores que se encuentran tanto en zonas urbanas de alta transmisibilidad como en zonas alejadas”, indicó representante en México de la Organización Panamericana de la Salud.
Empezar a vacunar por grupos de mayor edad es una buena idea, de hecho en Israel -que es el país más avanzado y está llegando al 70% de su población vacunada-, cuando terminaron de vacunar a los mayores de 60 años vieron casi inmediatamente una reducción significativa del número de hospitalizaciones y por lo tanto de la presión sobre el sistema de salud, indicó Cristian Roberto Morales Fuhrimann, representante en México de la Organización Panamericana de la Salud.
En el caso de México, que está por comenzar la vacunación de adultos mayores -cuya población asciende a más de 15 millones, aunque en el portal de Mivacuna. se han registrado más de 4 millones-, hizo un llamado importante: “hay que vacunar a todas las personas mayores al mismo tiempo, lo cual implica un desafío muy importante en términos logísticos, en términos de despliegue“.
Lo anterior lo dijo cuando la periodista Carmen Aristegui le preguntó si debe priorizarse la vacunación de adultos de la tercera edad en zonas marginadas o debe hacerse en zonas urbanas y de alto contagio.
Morales Fuhrimann dejó en claro que debe ser en ambas: “La priorización debería ser a adultos mayores que se encuentran tanto en zonas urbanas de alta transmisibilidad como en zonas alejadas”, con una “estrategia con enfoque intersectorial”.
Y subrayó que vacunando grupos prioritarios primero se pueden lograr reducciones en hospitalizaciones y mortalidad.
En entrevista para Aristegui en vivo el representante de la OPS reconoció la “situación extremadamente compleja” actualmente en América y la “baja disponibilidad de vacunas” por toda la demanda que hay en el mundo.
Foto: Victoria Valtierra/ Cuartoscuro
El desafío de vacunar a millones de personas, señaló, “no es algo que se consiga ni en uno ni en dos meses“.
Reveló que actualmente son apenas 70-71 países los que han iniciado su campaña de vacunación, entre ellos México, donde hasta ayer se completaron 85 mil 332 esquemas completos de vacunación contra Covid-19, principalmente a personal de salud y se han aplicado en total 725 mil 447 dosis.
“Estamos dos tercios de los países del mundo sin vacunación, no sólo son implicaciones éticas sino de salud pública. Si dejamos a 2 tercios de los países del planeta sin vacunas, estamos en el fondo sosteniendo una circulación de virus en una cantidad importantísima de personas y de territorios, lo cual puede generar variantes y mutaciones que eventualmente vengan a afectar a aquellos países que avanzaron en sus campañas de vacunación”, advirtió Morales Fuhrimann.
En el caso de México, destacó la importancia de priorizar en primer lugar a los trabajadores de la salud, más expuestos al contagio y que “necesitamos que estén en buena salud para atender a toda la población cuando se presentan formas graves de Covid-19”.
“Luego están las personas en mayor riesgo o mayor vulnerabilidad debido por ejemplo a su edad o sus comorbilidades, la hipertensión y diabetes son factores de riesgo importante para la forma grave de Covid-19″, anotó.
Uso de cubrebocas aunque ya se haya contagiado
Morales Fuhrimann recomendó el uso de cubrebocas en espacios cerrados cuando no podemos mantener la sana distancia de cuando menos metro y medio y cuando no hay capacidad de ventilación. El que recomienda es un cubrebocas de tres capas y puede ser de tela para “proteger el bolsillo”.
“El cubrebocas no es una solución milagro, si no ya hubiésemos controlado el virus y la transmisión. El cubrebocas es una de las varias medidas porque el cubrebocas no me protege a mí que uso el cubrebocas, protege a los demás de una potencial transmisión si es que yo estoy infectado. El cubrebocas en otras palabras es también una expresión de la solidaridad que hay que tener con los demás por el cuidado que hay que tener por nuestros seres queridos, nuestros compañeros, nuestros familiares, nuestros vecinos, nuestros conciudadanos”, dijo en entrevista con la periodista Carmen Aristegui.
“Hay que acompañar el uso del cubrebocas con lo que sí sabemos que es muy efectivo para luchar contra el SARS-CoV-2: el lavado de manos frecuente, con agua y con jabón que es más efectivo que el gel alcoholizado. Si no tenemos agua y jabón… sí el gel alcoholizado, con alcohol de más o por lo menos de 70%. Lavado de manos frecuente, asiduo… tenemos que asegurarnos que nos lavamos las manos de manera correcta”, indicó.
Anotó que “el cubrebocas se tiene que usar siempre” aunque la persona ya haya superado la enfermedad, pues existe la posibilidad de reinfección. Esto, luego de que la periodista Carmen Aristegui le comentara lo dicho por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, quien tras padecer Covid-19 dijo que no usaría cubrebocas, argumentando que ya no contagiaba.
En cuanto a si todas las vacunas existentes son seguras, anotó que en ningún país del mundo se le va a dar la posibilidad a la población de elegir vacuna, pues como su uso es de emergencia se aplicará aquella que esté disponible.
En tanto, “no sabemos cuál es la efectividad de las vacunas para menores de 15 años”.
Respecto a la vacuna Sputnik V dijo que “esperamos que entreguen lo antes posible todos los antecedentes para que la Organización Mundial de la Salud pueda evaluar su inclusión en la lista de uso de emergencia. Esta vacuna en particular tiene una tecnología muy similar a la de AstraZeneca, es cosa entonces de que se presenten los datos para que podamos estar confiados de que la vacuna es segura, eficaz y de calidad, lo que no significa que los países no puedan utilizarla“.
Ve la entrevista: