Una Central Solar Fotovoltaica para la Central de Abastos y una planta de reconversión de residuos sólidos urbanos en carbón vegetal estarán listas en junio de 2022.
Una Central Solar Fotovoltaica para la Central de Abastos y una planta de reconversión de residuos sólidos urbanos en carbón vegetal serán los dos megaproyectos de energías renovables que colocarán a la Ciudad de México en el programa de mejora del medio ambiente y atención al cambio climático, señaló la jefa de Gobierno Claudia Sheinbaum.
En videoconferencia de prensa, indicó que la Secretaría de Energía ha apoyado en el proceso de ambos planes; además, dijo que en el primero trabajarán con la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y en el segundo con el Instituto de Ingeniería de la UNAM.
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“Son dos proyectos de vanguardia para Ciudad de México, pero que además conviven con dos ejes sustantivos de la política energética del Gobierno de México, la primera es la soberanía, el que no dependamos tanto del exterior, ya lo estamos viendo ahora en la generación eléctrica y en el aprovisionamiento, oferta de energía en nuestro país”, sostuvo.
“Y la segunda es el cuidado del medio ambiente tanto en tema de contaminación local como en disminución de gases de efecto invernadero provocado por las termoeléctricas de CFE y el propio metano que produce una planta de composta o un relleno sanitario que almacena residuos orgánicos en la ciudad. Este año se hacen las licitaciones e instalación de tal manera que el primer semestre del 2022 estén operando ya las dos plantas”.
“La planta la va a operar CFE, va a ser una planta de CFE, es un proyecto conjunto y es así porque consideramos que es lo mejor para que CFE considere esta una de sus plantas. Como ustedes saben, la energía solar solo genera cuando hay luz solar y tiene que haber un balance entre lo que se consume en la noche y se genera en el día y quien mejor lo puede hacer es CFE sin que sea una entidad privada o la propia Central de Abastos quien tenga la generación. Es fundamental y además así fortalecemos la empresa del Estado”, agregó.
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Al respecto, la secretaria de Energía, Rocío Nahle, explicó que para las dos obras se utilizó el Fondo de Transición y Sustentabilidad Energética (FOTEASE). En el caso de la Central Solar Fotovoltaica para la Central de Abastos se le destinarán 500 millones de pesos. En tanto, la planta de reconversión de residuos sólidos urbanos en carbón vegetal tendrá 300 millones de pesos.
La Central Solar Fotovoltaica para la Central de Abastos tendrá una capacidad para generar 18 megawatts; sin embargo, podría duplicarse a 36 megawatts en unos años, señaló la mandataria capitalina. Su puesta en marcha permitirá un ahorro de 73.5 millones de pesos anuales en recibos de luz que paga la Central de Abastos a la CFE.
Además, reducirá 13 mil 852 toneladas de CO2 al año, equivalentes a lo absorbido por 890 mil árboles de la especie pinus ayacahuite durante 25 años de operación de la planta, y generará una Iluminación para 440 mil usuarios por día generada completamente a partir del sol.
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El desarrollo, licitación y supervisión estarán a cargo de la CFE con base en la Normatividad Federal. Se prevé que la instalación quedará completada el 30 de junio 2022.
Por su parte, el dinero destinado a la planta de reconversión de residuos sólidos urbanos en carbón vegetal será ejecutados por Instituto de Ingeniería de la UNAM con el objetivo de construir una planta para procesar hasta 48 toneladas por día de residuos para transformarlos en hasta 6.5 toneladas de hidrocarbón, el cual se podrá utilizar como sustituto de carbón o mediante gasificación para generar también electricidad.
Luis Agustín Álvarez Icaza precisó que este espacio producirá hidrocarbón, el cual va a impedir que se produzcan una gran cantidad de emisiones que ahora se origina en la planta de composta ubicada en el Bordo Poniente, al norte del Aeropuerto Internacional de Ciudad de México.
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“Estas emisiones ya no se van a producir, vamos a captarlas en carbón y la segunda es que este carbón se podrá utilizar para generar electricidad. La expectativa inicial es que podamos suplir parcialmente parte del carbón mineral que se está utilizando en las centrales de generación carboeléctricas de CFE, principalmente en Petacalco, Guerrero”, indicó.
“Se genera un círculo virtuoso porque por un lado estamos aprovechando la materia orgánica que ahora produce emisiones sin ningún tipo de beneficio para la ciudad y por el otro lado, este carbón no se quemará en Ciudad de México, sino en Petacalco donde va a sustituir combustibles que no son renovables como es el caso de la biomasa”.