PUERTO PRÍNCIPE – Cientos de haitianos se congregaron este viernes frente a la sede de la embajada de Estados Unidos en el país con la esperanza de que les concedan un visado para abandonar su país, ante la incertidumbre de lo que pueda ocurrir después del asesinato de presidente Jovenel Moïse.
Con pasaporte en mano, agitándolo y mostrando su foto ante las cámaras si se presenta ocasión, cientos de personas esperaban ser atendidas frente a la embajada, situada en el barrio de Tabarre.
Uno de los presentes, Jeferson Javeus, dijo en declaraciones a Efe en nombre del grupo que “después de la muerte del presidente no es posible vivir en Haití”, por eso han acudido a la embajada “a buscar la manera de salir de este país”, apuntó, rodeado de otros compatriotas desesperados, entre ellos mujeres y niños.
“Todo el mundo está en peligro en Haití”, insistió, “si mataron al presidente” quién no lo está, se preguntó.
Además cree que Estados Unidos debe hacer algo por el pueblo haitiano llegados a este punto, porque “no se puede seguir viviendo en esta situación”.
En contraste con la concentración frente a la sede diplomática, vigilada por hombres armados, en la capital el viernes se vivió el primer día de cierta normalidad tras el magnicidio.
Hoy se reabrieron las tiendas y comercios en todo Puerto Príncipe, mientras que los funcionarios regresaron a sus puestos de trabajo y en el aeropuerto el tráfico aéreo fluye sin problemas, después de que el Gobierno ordenara la reapertura de vuelos.
El primer ministro interino, Claude Joseph, decretó quince días de estado de sitio el miércoles pasado, horas después del asesinato de Jovenel Moïse.
Source link