Por Karina Cancino
Carlos Saldate, exdiputado local y ex líder transportista, fue vinculado a proceso por los presuntos delitos de secuestro y amenazas graves, relacionados con la compraventa ilegal de un terreno; apoyado por su “compadre”, el exfiscal de Nayarit, Édgar Veytia, sentenciado a 20 años de prisión en los Estados Unidos por narcotráfico, pero señalado en la entidad por diversos delitos, incluso de lesa humanidad.
El también ex líder del PRI de Tepic y excandidato por ese partido a la alcaldía de la capital permanecerá en prisión preventiva oficiosa durante 3 meses, cuando concluyan las investigaciones complementarias.
Carlos “S” fue presentado en audiencia ante un juez de control donde la Fiscalía General del Estado presentó pruebas respecto a las denuncias que un hombre hizo en su contra desde 2017 por el despojo de un terreno que era de interés para el exfiscal.
Sobre los hechos, se hizo oficial la versión respecto a que la víctima, a finales de 2012 recibió llamadas del ex servidor público, quien decía comunicarse de parte del exfiscal para la compra del terreno y ante la negativa, fue objeto de amenazas. En enero de 2013, Carlos “S” insistió con una nueva llamada a la víctima en las oficinas de la fiscalía porque Veytia le prestaría dinero para pagar el terreno, pero ante la negativa, el 21 de marzo de ese año el propio exfiscal le anunció que mandaría por él.
Al mediodía, la víctima fue llevada por policías encapuchados -de la Policía de Nayarit, creada por Veytia- hasta las oficinas del exfiscal, donde se realizó la compraventa forzada por amenazas.
Hasta este punto se desconoce si hay otras personas involucradas. Esta reportera tuvo acceso al expediente del reporte de hechos que inició la víctima el 4 de octubre de 2017, y señalaba al exgobernador, al exfiscal, al exdiputado mencionado y familiares, así como a un notario público por los presuntos delitos de secuestro, extorsión, desaparición forzada de personas, abuso de autoridad, tortura, despojo de inmuebles y amenazas.
Carlos “S” fue detenido el 22 de octubre de 2019; pesan sobre él tres procesos que lo señalan por los presuntos delitos de privación ilegal de la libertad y extorsión, por los que está actualmente vinculado a proceso en espera de que terminen las investigaciones complementarias.
Mientras se cumplen los plazos para las sentencias del fuero común, el exdiputado se encuentra en prisión en el penal federal de El Rincón desde diciembre de 2019, para garantizar su seguridad y evitar que corra peligro en el penal “Venustiano Carranza” de Tepic.
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