La pandemia también ha dejado su huella en los divorcios, separaciones y nulidades matrimoniales. En 2020, hubo 80.015 casos, lo que supone un descenso del 16,1% respecto del año anterior, según los datos del Instituto Nacional de Estadística publicados este lunes. Se trata de la mayor caída desde que el organismo comenzó a recabar estas cifras, en 1998. La gran bajada se registró durante el segundo trimestre del año, un 63,4%, cuando el país se confinó y se produjo un parón en la actividad judicial. Los datos también confirman la tendencia al alza de la custodia compartida: se otorgó en el 41,4% de las ocasiones. En 2007, el primer año en que el instituto estadístico recabó esta información, eran el 9,7%.
La mayor parte de las rupturas corresponden a divorcios (77.200), el 96,5% del total. De ellos, 1.095 fueron de parejas del mismo sexo. Además, hubo 2.775 separaciones y 40 nulidades. La tasa de nulidades, separaciones y divorcios por cada 1.000 habitantes en España fue de 1,7. La ciudad autónoma de Ceuta (con 2,1) registró la mayor cifra. Aragón (con 1,3), la menor.
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La Asociación Española de Abogados de Familia (Aeafa) atribuye el descenso a “la parálisis” de los juzgados durante más de tres meses, en palabras de su presidenta, María Dolores Lozano. Entre el 14 de marzo y el 5 de junio se suspendieron los plazos procesales, añade, algo que convirtió a 2020 en “el año con menos asuntos ingresados en los juzgados desde, al menos, 1995″. En el ámbito del derecho de familia solo siguieron adelante las causas urgentes; es decir, aquellas que comportaran un grave riesgo para los menores. Lo demás quedó interrumpido, detalla Lozano. La abogada también vincula el descenso a la crisis económica: quienes han perdido el empleo o el negocio no pueden sostener dos unidades familiares a la vez.
María Pérez Galván, vicepresidenta de esta organización, que agrupa a más de 2.500 letrados especializados en derecho de familia, explica que “todavía quedan coletazos de señalamientos que el año pasado hubo que posponer”. “Estamos celebrando juicios que se tendrían que haber visto el año pasado y estaban pendientes”, sostiene la letrada, que reclama la creación de juzgados de familia. Si se analizan los datos del INE, confirman la percepción de la abogada: en los primeros tres meses del año, el bajón fue del 17,4%, el segundo trimestre fue del 63,4%. El tercero experimentó un repunte del 21,6% y el cuarto, del 11,3%.
Esta asociación prevé que los datos de 2021 reflejen un aumento de divorcios y separaciones, fruto por un lado de la reactivación de los juzgados y, por otro, del periodo de convivencia de las parejas durante la pandemia. “Tras el confinamiento, la gente seguía teletrabajando y muchos no han tomado la decisión hasta que no ha vuelto la rutina, los niños al colegio…”, explica Pérez Galván. Los divorcios y separaciones se han reactivado “mucho” este año. Siempre hay un aumento después de las vacaciones de verano, explica la vicepresidenta. “Pero este año lo estoy notando mucho más que otros”, prosigue.
Aunque con números distintos, esta tendencia ya fue recogida en marzo por el Consejo General del Poder Judicial. Según sus datos, 2020 había sido el sexto año consecutivo en que se producía el descenso. En ese período, 95.060 parejas se divorciaron, separaron o solicitaron la nulidad, un 13,3% menos que en 2019. Las causas eran las mismas: el fuerte descenso de demandas, del 42%, durante el segundo trimestre del año, debido al confinamiento, así como a la suspensión de plazos procesales y las medidas de seguridad frente al coronavirus, que tuvieron un fuerte impacto en la actividad de los órganos judiciales.
Un aumento de las custodias compartidas
Cuatro de cada 10 matrimonios no tenía hijos. La custodia sigue atribuyéndose mayoritariamente a la madre (el 54,5%, y el 3,9% al padre), pero la compartida gana peso. En cuatro de cada 10 ocasiones se la atribuyó a ambos progenitores, cuando hace poco más de una década solo una de cada 10 era atribuida a los dos. “Además, hemos notado un repunte de las peticiones de modificaciones de medidas de parejas que tenían una custodia en exclusiva para la madre y ahora solicitan la compartida”, sostiene Pérez Galván. Lozano, presidenta de la asociación, apunta que también han detectado una subida en las peticiones de modificación de medidas para reducir la pensión de alimentos a los hijos por parte de parejas ya divorciadas, debido a la crisis económica.
El año pasado, ocho de cada 10 divorcios fueron de mutuo acuerdo, proporción que se eleva a nueve de cada 10 en las separaciones. La forma de la disolución del matrimonio influye en el tiempo en que tarda en resolverse. Si bien la duración media de los procedimientos de divorcio y separación fue de 5,4 meses, más de la mitad de los de mutuo acuerdo se resolvió en menos de tres meses. El 37% de los contenciosos tardó un año o más. La duración media de los matrimonios fue de 16,6 años, una cifra ligeramente inferior a la de 2019. Un tercio de los divorcios se produjeron después de 20 años de matrimonio o más, y el 19%, entre cinco y nueve años.
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