Energy Vault creó un edificio inteligente que utiliza la gravedad para almacenar, generar y distribuir energía. Su misión, ayudar al mundo a cambiar a verde.
Una nueva startup está revolucionando el sector de las energías limpias con un innovador científico enfoque: energía de la gravedad. El mundo se ha fijado objetivos estrictos para apagar los combustibles fósiles y la economía del carbono y poner en marcha la energía verde. La energía solar, eólica y nuclear han tomado la iniciativa en esta nueva revolución energética, pero enfrentan muchos desafíos.
El mayor obstáculo para cambiar a la energía solar y eólica es el almacenamiento de energía a gran escala. Cuando se produce energía verde, se utiliza inmediatamente o se almacena, pero la energía eléctrica no se puede almacenar directamente, necesita transformarse en otros tipos de energía. Las baterías, los sistemas de aire comprimido y el almacenamiento de agua por bombeo son algunos de los métodos que se utilizan en la actualidad. Pero escalarlos es ineficiente o demasiado caro.
Cableado informó que Energy Vault tiene como objetivo transformar la energía y apoyar al mundo en su transición a las energías renovables. La empresa está progresando rápidamente. Está a punto de cotizar en la Bolsa de Valores de Nueva York NYSE y tiene acuerdos impresionantes con corporaciones gigantes como BHP mining y DG Fuels, líder en combustibles renovables para la aviación. Pero aún más impresionante es su sistema. La empresa construyó enormes edificios “inteligentes” que pueden almacenar, generar, descargar y distribuir electricidad. Dentro de estos edificios industriales modernos y minimalistas, se levantan y se colocan grandes bloques de hormigón de 35 toneladas en ascensores para almacenar y descargar energía.
El poder de la elevación
Energy Vault dice que apilar, elevar y dejar caer grandes bloques de hormigón es una forma sorprendentemente eficaz de almacenar energía. La empresa añade que el hormigón es más barato que las baterías y no corre el riesgo de sobrecalentarse. Los bloques de hormigón no pierden rendimiento con el tiempo, no requieren un alto mantenimiento y son a prueba de incendios químicos. Los edificios de almacenamiento de energía de la compañía se pueden conectar a parques solares o eólicos e incluso a plantas nucleares para almacenar energía y maximizarla con la gravedad.
El concepto es simple. Cuando los vientos soplan y el sol brilla con fuerza, el edificio eleva ladrillos usando esa energía. Los mecanismos del ascensor también permiten almacenar la energía utilizada durante la elevación. En días nublados, o cuando los vientos son tranquilos, los ladrillos de 35 toneladas caen liberando la energía cinética almacenada transformándola en energía eléctrica.
Energy Vault ya probó su teoría construyendo una grúa multibrazo de 75 metros de altura única en su tipo. La grúa levanta y baja los bloques de 35 toneladas, lo que demuestra que su principio es justo en el dinero. Ahora la empresa ofrece soluciones más avanzadas. Su producto estrella es el Energy Vault Resiliency Center (EVRC). El edificio del elevador EVRC se puede escalar agregando unidades de 10 megavatios por hora. Los bloques de hormigón que suben y bajan se pueden construir a partir de “desechos, residuos de combustión de carbón, palas de turbinas eólicas fuera de servicio y relaves de desechos de procesos mineros”, dice la compañía. EVRC puede incluso manejar eventos climáticos naturales perturbadores, incendios forestales y clima extremo. Energy Vault cree que su Ciencias y la fuerza de la gravedad ayudará a impulsar el mundo a medida que se vuelve verde.
Fuente: Wired, Energy Vault