Lindsay Lohan, en un acto en Melbourne, Australia, en noviembre de 2019.James Gourley (Getty Images)
En 2014, agotada de la presión mediática y las tentaciones nocturnas de Los Ángeles, Lindsay Lohan decidió iniciar una nueva etapa en Dubái. Muchos pensaron que aquello no era más que un capricho pasajero y que pronto volvería a Estados Unidos. Pero, contra todo pronóstico, la protagonista de Chicas malas ha hallado a miles de kilómetros de la tierra que la vio nacer el sosiego y el anonimato que siempre había anhelado. “Mudarme aquí fue un nuevo comienzo”, afirmó al respecto en la revista Emirates Woman en 2018. “Se oye hablar más de la actualidad real que de los cotilleos de los famosos, lo cual aprecio mucho. Y no es que salga mucho por la noche, es un estilo de vida muy diferente para mí. Me vine con ese propósito: no tengo que ser vista públicamente todo el tiempo, ni comentar lo que estoy haciendo”.
Desde que en 2016 confirmara su ruptura con el empresario ruso Egor Tarabasov, lo que llevó a cancelar los preparativos de su inminente boda, no había trascendido ninguna otra relación suya. Sin embargo, la actriz sorprendió el pasado 28 de noviembre a sus cerca de 10 millones de seguidores en Instagram con una inesperada noticia: su compromiso con el banquero kuwaití Bader S. Shammas. “Mi amor. Mi vida. Mi familia. Mi futuro”, escribió debajo de un carrusel de románticas imágenes en la que se ve a ambos abrazados. Asimismo, aprovechó el momento para mostrar un anillo de compromiso de la firma Harry Winston, presidido por un diamante de seis quilates, cuyo valor se estima en 250.000 dólares (algo más de 220.000 euros). Aunque todavía se desconoce la fecha del enlace, hace unos días Lohan confirmó, según publicó People, que ya se encuentra inmersa en los preparativos del acontecimiento. “Ya comencé a hablar con una amiga mía sobre el vestido. Pero quiero hacer las cosas bien y quiero controlar el ritmo de todo. Pero es un momento emocionante. Soy muy femenina, así que…”, respondió intrigante la intérprete, que sí ha asegurado que lucirá varios looks ese día.
Aun llevándolo con suma discreción, con anterioridad la estadounidense ya había dado una pista de que no estaba soltera. En febrero de 2020, tras asistir a un festival de música en Dubái, compartió una instantánea acompañada de Dan Smith y Chris Wood, respectivamente vocalista y batería de la banda Bastille, así como de su hermana Aliana y del propio Shammas. Minutos después Lohan la eliminó de Instagram porque en el pie de foto, casualmente, mencionó a un “novio”. En realidad, tal como el representante de la estrella declaró recientemente a E! News, llevan tres años saliendo juntos desde que sus caminos se cruzaran en Dubái.
Todo lo que rodea a Shammas es un misterio. Según un artículo de Page Six, proviene de una adinerada familia cristiana de Kuwait y es hijo de madre libanesa y padre kuwaití. Tiene 34 años, uno menos que Lohan. Y aunque su cuenta de Instagram la mantiene privada (apenas le siguen 597 personas), gracias a su perfil de LinkedIn se tiene constancia tanto de dónde estudió como de su currículum profesional.
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Se formó en Estados Unidos: en 2010 se licenció en Ingeniería Mecánica en la Universidad del Sur de Florida y, durante los dos años siguientes, cursó un máster en Finanzas en la Facultad de Negocios John H. Sykes, afiliada a la Universidad de Tampa, también en Florida. Tras ello, trabajó como asociado en BNP Paribas Wealth Management en su Kuwait natal y, en febrero de 2017, se mudó a Dubái. Desde agosto de 2018, en la lujosa ciudad de los Emiratos Árabes Unidos, ejerce de vicepresidente adjunto en la entidad bancaria Credit Suisse.
Dada su animadversión a las redes sociales se desconocen cuáles son sus aficiones, sus gustos e incluso datos tan banales como si tiene hermanos o hermanas. Ahora bien, los más allegados a Lohan están encantados de que tenga a su lado alguien ajeno al mundo del espectáculo. “No es un tipo de Hollywood, no se ven fotos de ellos en la prensa. Ese era uno de los problemas de Lindsay: los paparazzi la acosaban y se inventaban historias. Fue duro, pero ahora ella está con un hombre al que no le gusta el protagonismo. Está relanzando su carrera y deseas que haya una buena persona en tu vida cuando pulsas ese botón de reinicio. Todo el mundo es feliz. Lindsay recuperó su vida cuando lo conoció, ha estado viviendo una vida realmente feliz y saludable”, aseveró hace unos días su padre, Michael Lohan, en la ya citada Page Six.
Estos días la actriz se encuentra en Utah (precisamente, Shammas voló hasta allí para pedirle matrimonio) rodando con el actor Chord Overstreet una comedia romántica navideña que llegará a Netflix en 2022. A la espera de que se den el “sí, quiero”, por lo pronto Lindsay Lohan ya ha reemprendido su carrera delante de las cámaras.