A través del programa Tipping Point, la NASA financiará empresas privadas que desarrollen ideas para trabajar cerca y sobre la superficie lunar para su misión Artemis.
NASA tiene $ 200 millones para impulsar nuevas tecnologías para establecer un campamento base en la luna. La misión Artemis III, cuyo lanzamiento está previsto para 2024, llevará a la humanidad de regreso a la Luna. Si bien las primeras misiones tripuladas vivirán y trabajarán dentro del módulo de aterrizaje Starship Lunar, a largo plazo, la NASA quiere construir una base lunar más avanzada en el polo sur.
Los seres humanos han vivido en el espacio durante más de 20 años desde que la Estación Espacial Internacional (ISS) comenzó a operar en el año 2000. Sin embargo, vivir en la Luna, a más de 238 mil millas de distancia de la Tierra, es más desafiante. Se necesita un mayor grado de sostenibilidad e independencia. Se espera que los astronautas vivan en la Luna por períodos no inferiores a un año.
La NASA ofrece 200 millones de dólares para ayudar a las empresas a desarrollar tecnología para la estación espacial lunar. La NASA financiará las mejores ideas para trabajar en y cerca de la luna a través del programa Tipping Point. La NASA necesita enfoques sólidos e innovadores para infraestructuras de distribución de energía, tecnologías de utilización de recursos lunares y construcción autónoma en la superficie lunar.
Robótica: energía y hábitats para la luna
La base lunar requerirá mucha energía para la ciencia, la perforación, el funcionamiento de maquinaria pesada, la alimentación de viviendas, las comunicaciones, los dispositivos de astronomía, la extracción de recursos y muchos otros sistemas. Dado que el polo sur de la luna no recibe mucha luz solar, la NASA está considerando pequeñas plantas nucleares para alimentar su base. Pero los expertos piden más tecnologías verdes.
Se han lanzado ideas para construir plantas solares en regiones de la luna más ricas en luz solar utilizando rovers y robots autónomos. El otro problema con la energía es cómo almacenarla. El almacenamiento en baterías es el método más tradicional, pero es costoso y vulnerable a los riesgos de incendios químicos. El almacenamiento y la distribución de energía por gravedad son más baratos y utilizan recursos lunares in situ sin riesgo de incendio.
La construcción robótica o autónoma en el espacio tiene muchos beneficios. Mantiene a los astronautas a salvo de tareas arriesgadas en entornos peligrosos, automatiza el trabajo repetitivo con mayor velocidad, puede mover estructuras más grandes y minimiza los errores. La vanguardia de la construcción de hábitats robóticos incluye hábitats inflables, hábitats impresos en 3D, arquitectura robótica y construcciones que utilizan elementos geográficos como cráteres o hábitats subterráneos. La NASA también necesita tecnología para extraer recursos como agua, aire, cargas útiles de transporte volátiles, herramientas y astronautas. Una cosa está clara, NASA los astronautas en la luna trabajarán codo a codo con la mayor participación de tecnología robótica jamás vista.
Fuente: NASA, ESA Robótica