Podría decirse que la relación entre Christian Gálvez y Patricia Pardo va viento en popa. Tanto es así, que durante el pasado martes, día 26 de julio, la pareja protagonizó su primera intervención conjunta en el plató de El Programa de Ana Rosa, en la cual dejaron entrever que su conexión va más allá de lo meramente físico. Un vínculo que ha dejado en un segundo plano a Almudena Cid, de la que hasta hace días se creía que aún seguía sanando las heridas que su ruptura con el presentador le había dejado.
Pero nada más lejos de la realidad. Más de medio año después de haber hecho pública su separación con el de Móstoles, la exgimnasta parece haber recuperado la ilusión en el amor de la mano de Gerardo Berodia, un exfutbolista del CD Lugo de 41 años que inició su carrera nada más y nada menos que en el Real Madrid. Ahora, aunque no es activo en los terrenos de juego, sí que sigue vinculado al deporte al colaborar en programas como El chiringuito de jugones, además de ser agente de otros jugadores.
En su último número semanal, Semana se ha hecho eco de las primeras imágenes de la deportista con el que podría ser su amor. En ellas, aparecen paseando mientras llevan a cabo una agradable charla, dado que ya mantenían una muy buena amistad: “Todos juntos hacían planes y compartían momentos antes de que surgiese la chispa. Gerardo y ella tienen el mismo círculo de amigos (…) La relación que tienen, para llevar tan poco tiempo, es muy fuerte. Pero al final es lo que suele pasar cuando antes de dar un paso más eres amigo de la persona”, confirman fuentes cercanas a la pareja al medio citado, aclarando así que ambos avanzan a pasos agigantados.
Una trayectoria marcada por los incidentes
Aunque no ha sido hasta ahora cuando su nombre ha sonado con más fuerza, Gerardo cuenta con una trayectoria profesional impecable, aunque marcada por algún que otro susto en lo que a la salud se refiere. Y es que, en primer lugar tuvo que enfrentarse a un tumor en el tobillo que a priori únicamente tenía dos soluciones: amputar el pie o quitar el hueso. Por suerte, sus padres buscaron una segunda opinión con el doctor Epeldegui, que salvó la vida de Berodia y le permitió desarrollar su carrera, pasando por el Navalcarnero, el Leganés, el Zamora, la Ponferradina o el Conquense, poniendo el broche de oro a su andadura por el fútbol español en el Lugo. No fue hasta 2013 cuando se mudó a Bolivia, donde se convirtió en toda una estrella del balón. Pero finalmente, veía cómo su sueño se truncaba al verse obligado a volver a su tierra natal para afrontar el grave accidente que sufrió su hijo, trabajando en otros oficios como el de taxista.
Después de haberse separado de la que fuera su esposa, ahora Gerardo ha vuelto a creer en el amor con Almudena Cid. Ambos están atravesando una situación sentimental similar, razón por la que se han convertido en perfectos confidentes, y quién sabe si también en compañeros de vida.