El expresidente de Brasil y candidato a ocupar el cargo en estas elecciones, Luiz Inácio Lula da Silva, aseguró que el ambiente político actual en el país, con el crecimiento de la extremaderecha, es “peor” que el que se vivió previamente al golpe militar de 1964 que trajo consigo 20 años de dictadura.
“Estamos viendo ganar espacio a una derecha rabiosa. Personas que no conocen la palabra respeto y democracia. Hoy todo el mundo está siendo amenazado y no es solo en Brasil. En Italia, Hungría y otros países”, alertó Lula durante un encuentro con representantes católicos en Sao Paulo.
“Es la extremaderecha con cabeza fascista y la familia del presidente representa esa derecha internacional”, dijo Lula en referencia a su rival en la inminente segunda vuelta de estas agitadas elecciones, Jair Bolsonaro.
En ese sentido, el expresidente brasileño señaló la necesidad de “concienciar” a la sociedad de los daños que traen consigo las políticas y maneras del bolsonarismo, parecidas a las forma de actuar de la extremaderecha en otros países.
El próximo 30 de octubre se realizará la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Brasil, en las que además del futuro mandatario, también están en juego varios gobiernos locales, después de que en primera vuelta se decidiera la composición del Congreso, uno de los más conservadores de los últimos años.
Este lunes, el presidente Jair Bolsonaro aseguró que el análisis sobre si hubo fraude en la primera vuelta electoral de octubre lo están haciendo las Fuerzas Armadas.
Los militares anunciaron que analizarán la imparcialidad de la primera ronda de las votaciones celebrada el 2 de octubre, pero más de dos semanas después no han presentado públicamente un informe al respecto.
El pasado 15 de octubre, Lula da Silva aseguró que gana las elecciones, limitará de nueva cuenta el tiempo que un militar en activo puede ocupar un cargo político. En el antiguo Estatuto de los Militares los oficiales tenían que pasar a la reserva si pasaban más de dos años en cargos de naturaleza civil, una norma anulada por Bolsonaro, quien ha optado por militares para numerosos cargos ministeriales.
Lula, candidato por el Partido de los Trabajadores, continúa al frente de las elecciones y podría incluso alcanzar el 50 por ciento de los votos, muy por delante de Bolsonaro, que se quedaría alrededor del 42 por ciento.
(Con información de Europa Press y Aristegui Noticias)
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