Ana Obregón lleva dos años sin poder levantar cabeza, y es que la pérdida de sus padres, con 16 meses de separación, y de su hijo Aless en tan poco tiempo ha sumido a la presentadora en un pozo muy oscuro, alejándola de aquella Ana conocida por su risa y su buen rollo.
Durante una entrevista para la revista ‘¡Hola!’, la actriz madrileña ha desvelado secretos y tradiciones familiares que ya no tendrá con quien llevar a cabo. La modelo de 67 años ha confesado que estas Navidades serán las peores hasta el momento: “No tengo dónde ir y no quiero pasar la Nochebuena sola en casa”.
Sin embargo, la presentadora ha sido capaz de volver al trabajo y seguir con el proyecto que su hijo dejó empezado: un libro lleno de recuerdos. Además, ha puesto en marcha la ‘Fundación Aless Lequio’ para luchar contra el cáncer que le arrebató al joven de 27 años.
Durante la entrevista con ‘¡Hola!’, Obregón ha recordado la generosidad por la que destacaba su hijo, sobre todo durante las fechas que se acercan, y es que, desde bien joven, cuando solía escribir la carta para ‘Papá Noel’, siempre añadía que él renunciaba a sus regalos si eso significaba que otro niño más necesitado los recibía en su lugar.
La actriz ha rememorado Navidades pasadas, cuando solía pasarlas con su exmarido, Alessandro Lequio, y su hijo, a petición de este. Cuando se fue haciendo mayor, Obregón recuerda lo mucho que le gustaba a su hijo celebrar las fiestas con sus amigos, tradición que llevó acabo hasta en su última Navidad, cuando bromeaba con la quimio: “Decía que a lo mejor alucinaba y veía de verdad a Papá Noel”.
La presentadora confiesa a ‘¡Hola!’ que todavía no tiene planes para esta Nochebuena: “Tal vez iré a Marbella, con una amiga, o a algún lugar donde no tenga ningún recuerdo de nada… Ya veremos”.
Con relación a las campanadas de fin de año, Obregón recuerda a su amiga y compañera Anne Igartiburu, quien no despedirá el año con RTVE. En cambio, la modelo estará acompañada por sus amigos, ‘Los Morancos’, en sus primeras campanadas sin su madre.