El ministro de Defensa de Perú, Jorge Chávez, descartó por el momento el fin de las protestas ciudadanas, iniciadas tras la destitución y detención del expresidente Pedro Castillo, y en las cuales se han contabilizado 27 muertes, la mayoría de civiles inconformes.
En declaraciones al diario ‘El Comercio’, Chávez animó al Ejecutivo y a la presidenta andina, Dina Boluarte, a buscar los mecanismos oportunos para acercarse a las organizaciones que impulsan las protestas.
Chávez instó además a los ministros y funcionarios del Gobierno a desplazarse a aquellas regiones donde más intensas son las manifestaciones para “tratar de tranquilizar, explicar y satisfacer la demandas justas de la población” y que, considera, han sido “totalmente incumplidas”.
“Tanto la presidenta Boluarte como el primer ministro (Alberto Otárola) nos han pedido intensificar el diálogo, porque este marco de violencia y esta crisis aún no se han cerrado”, señaló Chávez, quien agregó que esta es la posición generalizada del Ejecutivo.
Asimismo, mostró su convicción sobre la necesidad de iniciar un proceso de comunicación entre los órganos implicados para abordar la realización de elecciones anticipadas y no esperar hasta abril de 2024, una propuesta que ya fue aprobada por el Parlamento andino.
Finalmente, el encargado de Defensa subrayó que, precisamente tras certificarse el adelanto electoral, las protestas se han atenuado, si bien insistió en que no han llegado a su fin y pidió identificar a los principales responsables de las manifestaciones violentas.
Sectores de Perú salieron a las calles del país desde que el 7 de diciembre Castillo fuera destituido y detenido tras anunciar la disolución del Parlamento y decretar un Gobierno de excepción, unas medidas que no fueron respaldadas y que el equipo de su sucesora tildó de “golpe de Estado“.
Entre las principales demandas de los asistentes a las protestas se encuentra tanto la dimisión de Boluarte como jefa de Estado, como la convocatoria de elecciones anticipadas.
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