¿En qué invierte un millonario? Bill Gates, que logró convertirse en uno de los hombres más ricos del mundo gracias a su empresa Microsoft, invierte ahora en algo que nadie esperaba. El multimillonario y filántropo parece haberse fijado en una nueva inversión que de hecho está ahora en auge y que atrae a las grandes fortunas. ¿De qué se trata?
La nueva inversión de Bill Gates
Bill Gates parece estar decidido a aumentar su fortuna gracias a las nuevas inversiones que está haciendo nada más y nada menos que en cultivos. De hecho, posee terrenos en 18 estados de EE.UU. Según la revista Land Report, tendría un total de unas 100.000 hectáreas repartidas por todo el país. Sus propiedades más grandes se encuentran en Louisiana, Arkansas y Nebraska.
Todas estas tierras representan un capital de unos 700 millones de dólares. Pero, ¿por qué el cuarto hombre más rico del planeta está invirtiendo en agricultura? ¿Y por qué cada vez más hombres multimillonarios lo hacen?.
La razón de Gates para invertir en cultivos
Desde un punto de vista práctico, Gates estaría invirtiendo en el suelo gracias a las sugerencias recibidas del fondo de inversión Cascade Investments que gestiona su fortuna. Es una forma de diversificar su cartera. Y también porque la tierra agrícola es una inversión relativamente estable.
Gates también está invirtiendo en empresas que fabrican sustitutos de la carne a base de plantas . Invirtió en particular en la empresa Impossible Foods, que produce carne con soja o patatas en California. En cuanto a su Fundación Bill y Melinda Gates, financia programas de apoyo para agricultores en África y el sudeste asiático.
La relación de la tecnología con la agricultura
Por otro lado, no pasa desapercibida la existencia de un estrecho vínculo con el desarrollo de la agricultura digital.
Los registros de tierras digitales y los volúmenes masivos de datos acumulados por grandes compañía tecnológicas como Microsoft y Amazon de los campos de los agricultores facilitan a las empresas agrícolas que buscan acuerdos agrícolas rentables.
Estas empresas también pueden usar tecnología satelital y drones para monitorear sus granjas de forma remota y asegurarse de que las personas que las administran sigan sus estándares y pautas.
Es posible que la combinación de avances en agricultura digital y oportunidades para créditos de carbono y lavado verde haga que las transacciones de financiamiento agrícola transfronterizo sean aún más rentables y ciertamente más atractivas para los inversores.
Los grandes actores de las tierras agrícolas están utilizando estos espacios para permitir que las grandes empresas, ya sea que sean propietarias de la tierra o no, cumplan con sus objetivos de neutralidad de carbono, y están invirtiendo fuertemente en el cálculo del potencial para reducir las emisiones y cambiar sus prácticas agrícolas industriales.
Muchas empresas se han comprometido con objetivos de carbono neutral en una fecha específica, y una de las formas de lograrlo es invirtiendo en bosques y tierras agrícolas.
¿Por qué invertir cada vez más en tierras agrícolas?
Las adquisiciones de tierras agrícolas por parte de corporaciones multinacionales están aumentando en todo el mundo. Los inversores llevan unos 10-20 años iniciando estas adquisiciones con diferentes objetivos como garantizar la soberanía alimentaria de su país, emprender nuevas empresas agrícolas de alto crecimiento, como los biocombustibles, o simplemente diversificar sus inversiones. Si hasta entonces las compras de tierras, tanto agrícolas como no agrícolas, se ubicaban en países de continentes en desarrollo -como África, América del Sur, Asia- hoy la situación es bastante distinta.
Las tierras agrícolas del mundo , como les gusta repetir a los administradores de fondos agrícolas, son un recurso finito. Como resultado, mientras más grandes corporaciones toman el control, menos queda para los pequeños agricultores, los pueblos indígenas y las comunidades rurales. Estas poblaciones ya subsisten en una fracción cada vez menor de las tierras agrícolas del planeta, y aún así producen la mayor parte de los alimentos del mundo.
El caso de Gates, como el de otros millonarios, les permite como dijimos diversificar su cartera pero también, se convierten precisamente en arrendadores de aquellos que necesitan de la tierra para trabajar y en definitiva para vivir.
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