En España hay multitud de rincones maravillosos, entre ellos este pueblo de Mallorca considerado uno de los mejores destinos de Europa para disfrutar de unos días de vacaciones. Un remanso de paz y tranquilidad para todos los viajeros situado en plena Sierra de Tramontana.
Sóller
Con el paso de los años, ha cobrado mucho protagonismo entre los turistas nacionales e internacionales gracias a un casco antiguo que supone un viaje al pasado y a un precioso puerto.
Por no hablar del famoso Tranvía de Sóller, que fue inaugurado el 4 de octubre de 1913 y continúa en funcionamiento. Une el municipio con el puerto marítimo a través de campos y huertos de cítricos. Es uno de los iconos ms representativos de las Islas Baleares.
Hay varios lugares imprescindibles en el pueblo mallorquín:
- Calle de Sa Luna: es la calle más comercial y una de las visitas clave en Sóller. A pesar del paso del tiempo, conserva algún edificio medieval del siglo XV, como la Casa de Sa Luna.
- Puerto de Sóller: el paseo marítimo es un lugar precioso, con las pintorescas casa de pescadores y las pequeñas embarcaciones a ambos lados. Uno de los mejores es llegar hasta el Cap Gros, desde donde hay unas vistas increíbles del puerto.
- Iglesia de Sant Bartomeu: un impresionante edificio de roca caliza que destaca por su fachada modernista diseñada por Joan Rubió i Bellver y su campanario neogótico.
- Banco de Sóller: justo al lado se encuentra el Banco Sóller, cuyo origen se remonta a finales del siglo XIX. Es de estilo modernista, con su portal de arco de medio punto y sus ventanas de hierro forjado.
Playas
La playa del Puerto de Sóller tiene muy buen ambiente. De arena fina y blanca y aguas cristalinas color azulado, tiene 800 metros de largo y 30 metros de ancho. Desde el puerto se pueden hacer excursiones en catamarán hacia Sa Calobra y otros destinos.
Muy cerca del casco antiguo de Sóller hay varias playas que son estupendas para pasar el día. Cala Deià es una de las más destacadas, con sus aguas cristalinas color turquesa y un entorno montañoso espectacular.
Cala Estallecens, rodeada de enormes acantilados de arcilla roja, es frecuentada por bañistas locales. La arena es de guijarros y rocas y las aguas cristalinas con tonos azules y verdes. Un lugar muy recomendado para los amantes de la naturaleza.
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