Las autoridades polacas anunciaron este viernes la evacuación de aproximadamente 14 mil personas de la ciudad de Lublin, esto tras hallar la noche del jueves una gran cantidad de explosivos sin detonar que datan de la Segunda Guerra Mundial, que finalizó en 1945.
Según el equipo de zapadores que examinaron el lugar, “el riesgo de explosión es muy alto” y se ha hallado al menos una bomba cuyo peso es de unos 250 kilos, lo que hace urgente la evacuación de la zona y de las calles aledañas.
Las labores de evacuación comenzaron en punto de la 07:00 horas, tiempo local, y las autoridades han puesto en marcha un dispositivo de transportes públicos, aparcamientos gratuitos, asistencia para discapacitados, puntos de recogida y refugios temporales.
Se ha pedido a todos los evacuados que abandonen el área antes de las 11:00 y, que antes de abandonar, corten suministros de gas, agua y electricidad, cierren puertas y ventanas y que lleven consigo sus documentos de identidad, junto con cualquier medicamento que puedan requerir.
Una vez completa la evacuación, un comando de zapadores militares intentará desactivar los explosivos, operación que se espera tome una cantidad considerable de horas.
En las inmediaciones de la calle Wroska, el lugar donde se hallaron los explosivos, había un pequeño aeródromo y una fábrica de aviones que fue bombardeada por Alemania en septiembre de 1939, poco después de desencadenarse la Segunda Guerra Mundial, y se cree que la bomba encontrada y los explosivos son de esa época.
Los hallazgos de explosivos y bombas que han permanecido enterrados desde la contienda son relativamente frecuentes en Polonia, cuya invasión dio inicio al conflicto, y donde se llevaron algunos de los combates más intensos de toda la guerra.
Hace un mes fueron halladas 72 piezas de artillería sin explotar en el terreno de una escuela situada a 80 kilómetros de Varsovia mientras se trabajaba en la renovación de las tuberías del centro.
El año pasado, miles de habitantes de Breslavia fueron evacuados en dos ocasiones tras el hallazgo de varias bombas, una de media tonelada, cuando se llevaban a cabo trabajos de construcción, y en febrero de este año una niña de 11 años se hirió al disparar accidentalmente un fusil de la Segunda Gran Guerra, el cual encontró en un bosque.
(Con información de EFE)
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