Akbars es un gato siberiano cuya pista se perdió el 18 de junio de 2021, cerca de la calle Playas de la Ensenada, en Almerimar. Allí pasaba Anel pasaba sus vacaciones con la familia, incluido su hijo, que por en entonces tenía tres años.
La búsqueda de Akbars en Almería
Ahora, la joven ha volado desde Kazajistán hasta Almería para buscar al gato que perdió hace dos años en nuestro país. Un viaje de más de 13.000 kilómetros para intentar localizarlo y llevarlo de vuelta a casa.
«Lo crié como a un hijo y si íbamos al bosque, al mar, a caminar por parques o a la ciudad, él siempre me seguía. Cada día desde entonces he pensado en volver», asegura, según recoge Nius Diario. Así que, aprovechando las vacaciones de verano en el trabajo, ha viajado hasta Almería para buscar a Akbars.
Mientras Anel busca al gato en Almería, su hijo, que ahora tiene cinco años, espera con su abuela en Kazajistán. «Han pasado años años y mi hijo aún lo está buscando», cuenta. Sabe que es muy difícil dar con su mascota, pero tiene la esperanza de localizarlo.
Lleva varios días recorriendo clínicas veterinarias entre El Ejido y Almería capital. También está imprimiendo carteles con la foto del gato y pegándolos por la ciudad y ha publicado varios mensajes en redes sociales.
La joven pasará en Almería otra semana más. Quiere visitar las clínicas veterinarias de la zona que le quedan, así como varios refugios de animales. «Es un miembro de mi familia y lo queremos muchos», explica Anel, que en esta ocasión no quiere irse sin él.
La increíble historia de Lucky
Cuando una mascota desaparece, nunca se debe perder la esperanza de que vuelva a casa, incluso si pasan días, meses o años. Lucky es un gato naranja que desapareció en 2020 en Miami (Estados Unidos).
Sus propietarios volvieron a tener noticias de él en febrero de 2023. Lo más sorprendente es que estaba en otra ciudad a 2.250 kilómetros de distancia. Fue encontrado en Kansas y cómo llegó hasta allí continúa siendo un completo misterio.
En febrero del 2023, un residente de Prairie Village, Kansas, encontró un gato naranja en la calle. Debido a las bajas temperaturas y el frío que hacía, se puso en contacto con la Unidad de Control de Animales local para pedir ayuda. Gracias al microchip, pudieron encontrar a sus propietarios en Miami. Cuando hablaron con ellos, estaban incrédulos, pero muy felices de volver a tener noticias de su mascota.
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