La policía de Perú arrestó a un hombre sospechoso de perpetrar una ola de amenazas de bomba contra escuelas, sinagogas, hospitales y aeropuertos en Estados Unidos, lo que provocó evacuaciones, retrasos de vuelos y otras perturbaciones en cinco estados este mes, dijeron el jueves las autoridades.
Eddie Manuel Núñez Santos, un limeño de 33 años, está acusado de realizar 150 amenazas de bomba en total, algunas dirigidas a instituciones judías durante la festividad de Rosh Hashaná, dijo en un comunicado la Fiscalía Federal para el Distrito Sur de Nueva York.
Todas las amenazas resultaron ser engaños, afirmó. Un portavoz del Departamento de Justicia dijo que su motivo en algunos casos era lograr que jóvenes le enviaran fotografías sexualmente explícitas, o de lo contrario detonaría bombas.
No se supo de inmediato si Núñez Santos, quien enfrentaba la extradición a Estados Unidos bajo una acusación federal en la ciudad de Nueva York, había obtenido representación legal.
Las amenazas, transmitidas por correo electrónico, estaban dirigidas a supuestos objetivos en la ciudad de Nueva York, así como en Alaska, Pensilvania, Connecticut y Arizona, dijeron funcionarios en el comunicado.
Una amenaza citada como ejemplo por los fiscales decía: “Coloqué múltiples bombas en todas las escuelas de sus distritos. Las bombas explotarán en unas pocas horas. Con mucho gusto sonreiré cuando sus familias lloren por sus muertes”.
Ese mensaje provocó la evacuación de 1,100 estudiantes de 20 escuelas en Pensilvania, dijeron las autoridades.
Las supuestas amenazas “causaron una movilización inmediata por parte de las autoridades federales y estatales, desviando recursos críticos de aplicación de la ley y de seguridad pública, y causaron miedo en cientos de comunidades”, dijo el fiscal federal Damian Williams en el comunicado.
El procesamiento de ocho páginas acusa a Núñez Santos de dos delitos graves relacionados con mensajes enviados a múltiples destinatarios en Nueva York: realizar comunicaciones interestatales amenazantes y perpetrar un engaño. Cada uno conlleva una pena máxima de cinco años de prisión.
El hombre también fue acusado de intento de explotación sexual de un niño, intento de coerción y seducción de un menor e intento de recepción de pornografía infantil. Esos cargos, por los que podría enfrentar hasta 30 años de prisión si es declarado culpable, se derivan de los presuntos intentos de persuadir a una niña de 15 años en Westchester, Nueva York, para que le enviara fotografías sexualmente explícitas.
La investigación fue dirigida por la Fuerza Conjunta contra el Terrorismo de Nueva York del FBI. Las autoridades rastrearon a Núñez Santos a través de sus comunicaciones telefónicas y por Internet, según el comunicado de prensa.
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