El presidente señaló que él encabeza un “gobierno civilista, no es una dictadura militar”.
“Yo encabezo un gobierno civilista, no es una dictadura militar o un gobierno civil con afanes autoritarios. Cuesta trabajo que esto se entienda, pero poco a poco los hechos van a demostrar que esta es la mejor vía”, dijo el presidente AMLO durante la conferencia de prensa matutina desde el estado de Oaxaca.
Al ser cuestionado en varias ocasiones sobre la persona que en específico tomó la decisión de liberar a Ovidio Guzmán López, el presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que de manera conjunta, el gabinete de seguridad, integrado por Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Secretaría de Marina (Semar) y Guardia Nacional, el que determinó eso.
“Yo respaldé esa postura porque considero que lo más importante es la protección de las personas”, manifestó durante la conferencia de prensa desde el estado de Oaxaca.
Sobre si esta decisión demuestra debilidad del Estado, el mandatario federal sostuvo que “eso es más que nada una conjetura de los expertos, sobre todo de nuestros adversarios. Nosotros no tenemos duda de que fue la mejor decisión”.
Reiteró que ya se probó que combatir la violencia con más violencia resultó un rotundo fracaso e indicó que esa política autoritaria de la razón de Estado causó miles de muertos, “más de un millón de víctimas, nosotros no vamos a seguir con eso, no queremos la guerra”.
“Quien no tiene la razón, quien usa la fuerza, no tiene autoridad moral… Aquí lo importante es mantener las convicciones, los principios, no zigzaguear. Nosotros tenemos una política definida para garantizar la paz y tranquilidad y ya sabemos lo que no hay que hacer: el uso de la fuerza, violencia, masacres. Ya sabemos que eso no da resultados”, acotó.
López Obrador le pidió a los mexicanos tener confianza de que no hay impunidad “porque no hay contubernio entre delincuencia y autoridades. Está bien pintada la raya, la frontera entre delincuencia y autoridades”.
“Lo de ayer fue una situación producto de una circunstancia donde se valoró que se tenía que proteger la vida de seres humanos, que es lo más sagrado que hay. No existe la asociación delictuosa entre autoridad y delincuencia. Se pensó que eso era lo más conveniente y se actúo de esa forma. Creo que hicieron bien los mandos que tomaron esta decisión”, finalizó.