“Iremos por ellos para que paguen”, refiere sobre la captura de delincuentes, pero afirma que “la vida de la gente es insustituible”.
Al comparecer ante el pleno de la Cámara de Diputados, Alfonso Durazo, secretario de Seguridad Pública y Protección Ciudadana (SSPC) señaló que el gobierno federal ha preferido la crítica a mantener la opacidad y la inercia.
“Hemos preferido la crítica a mantener la opacidad e inercia. No tenemos nada que ocultar, no nos interesa mantener secrecía alguna”, dijo luego de entregar el informe sobre los hechos en Culiacán, Sinaloa.
Durazo Montaño señaló que pese a las duras críticas por el operativo fallido en el que se liberó al narcotraficante Ovidio Guzmán, la administración encabezada por Andrés Manuel López Obrador ha elegido actuar con prudencia, privilegiando el uso de la inteligencia, sobre la fuerza y poniendo por delante la integridad física y la dignidad de las personas para evitar por todos los medios posibles la violencia y el derramamiento de sangre.
“En el caso de Culiacán lo que pudo haberse convertido en un episodio de guerra y derramamiento de sangre inocente se resolvió privilegiando la paz pública”, afirmó.
Destacó la transparencia en materia de seguridad y afirmó que “no defendemos intereses oscuros ni inconfesables, no nos mueve ni el cochupo ni la componenda, solo el objetivo de pacificar el país y devolver a la sociedad la tranquilidad que anhela”.
Sobre la represión como método de acción del Estado, indicó que esta tiene riesgos muy altos. “Se nos ha criticado por no usar la fuerza pública en algunas manifestaciones sociales, las críticas han llegado a través de adherentes de la guerra contra el narco. Los bots han jugado un rol muy relevante en la difusión de estas críticas”.
“La estrategia basada en el uso de la fuerza policial y militar generó decepciones, no se registra un logro relevante durante los sexenios en la que se aplicó”, abundó.
Refirió que a los maleantes se les debe enfrentar con firmeza y transparencia para conquistar la paz y que no se permitirá fingir que la solución del problema de inseguridad es sencillo. No obstante, afirmó que la estrategia está rindiendo frutos paulatinamente.
“Siempre habrá momento para capturar a quienes delinquen, no hay que dudar que iremos por ellos para que paguen por sus fechorías, pero la vida de la gente es insustituible”, acotó.
“Otro México seguro y en paz es posible. Ahora hay inseguridad y eso no es ninguna sorpresa, pero también hay confianza en el gobierno del presidente López Obrador de que entregaremos en 2024 un país con tranquilidad y en paz”, finalizó.
Ante los resultados en la materia, diputados de oposición demandaron al Secretario de Seguridad cambiar la estrategia.
Sin embargo, en la ronda de posicionamientos, Mario Delgado, coordinador de los diputados de Morena, reconoció el cambio que hizo el presidente López Obrador en la estrategia anterior para combatir la violencia. “Ya no podemos ignorar el daño colateral, no podemos acostumbrarnos a despreciar la vida humana”.
Jorge Arturo Espadas Galván, del PAN, criticó que México vive una terrible inseguridad y que el gobierno actual tiene responsabilidad en ello, no solo los sexenios pasados de Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto.
“Al presidente de la República le digo: las víctimas de la delincuencia sí guardamos rencor, sí pedimos la fuerza contra el crimen… No es permisible que se burlen de las víctimas de los delitos en las mañaneras, no podemor ir con fuchis, guácalas o acusándolos con las mamás”.
Cuando pasó a la tribuna Espadas, lo acompañaron varios legisladores de su bancada con pancartas y una gran lona con la frase “Seguridad sin pretextos” y un contador con el número 30 mil 518, cifra de asesinatos desde el 1 de diciembre cuando inició la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Héctor Yunes Landa, del PRI, afirmó que el 2019 ha sido un año tremendamente violento, con una cifra histórica de homicidios, “sin embargo no hay un reconocimiento del gobierno federal de esta lamentable situación, no vemos un afán de autocrítica y tampoco vemos un ímpetu de corrección”.
“Fue el presidente quien se fijó a sí mismo los seis meses, el plazo ya se cumplió y no se cumplió el compromiso“, recordó el diputado del PRI.
Por su parte, Alfredo Porras Domínguez, del PT, le lanzó un mensaje a los panistas al señalar que “del tamaño de la reacción de los panistas, es el tamaño de su culpabilidad, ellos iniciaron esta sangre, este pueblo que reclama justicia, ellos lo empezaron”; y Tonatiuh Bravo Padilla, de Movimiento Ciudadano, sostuvo que “la seguridad en México está convertida en un problema de Estado”, por lo que urgió a un nuevo Acuerdo Nacional en materia de seguridad, justicia y paz para que México no falle en garantizar el estado de derecho.
De manera inédita, a la comparecencia de Durazo asistieron -y estuvieron en primera fila- los titulares de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval; y de Marina, Rafael Ojeda, así como el consejero jurídico Julio Scherer, además del titular del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), el general Audomaro Martínez Zepeda.
De forma inédita, en la comparecencia de Durazo lo acompañaron los titulares de la Sedena, Semar, e incluso el consejero jurídico de la Presidencia, Julio Scherer, y otros integrantes del gabinete de seguridad.