La denuncia anónima ante el gobierno estadounidense fue revelada por The Washington Post; la Iglesia rechazó la acusación.
La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días ha acumulado 100 mil millones de dólares provenientes de los diezmos, sin destinarlos a obras de caridad y evitando sus obligaciones fiscales, de acuerdo con una denuncia anónima dirigida al Servicio de Impuestos Internos (IRS) de Estados Unidos, reportada por The Washington Post.
La persona denunciante informó al IRS que los 100 mil millones de dólares fueron invertidos en una compañía de manejo de inversiones de la propia iglesia, llamada Ensign Peak Advisors, a lo largo de 22 años sin ser destinados a las causas benéficas para las que tendrían que haber sido adjudicados.
De acuerdo con The Washington Post el denunciante es exgerente de inversiones de Ensign Peak Advisors.
En un comunicado, la Iglesia rechazó la acusación difundida a través del diario estadounidense y afirmó que la “vasta mayoría” de sus donaciones son usadas inmediatamenta para las necesidades de la comunidad, incluyendo templos, educación, trabajo humanitario y esfuerzos misioneros a lo largo del mundo.
“Desde hace muchos años, una porción es metódicamente salvaguardada a través de un sabio manejo financiero y la construcción de una prudente reserva para el futuro. Este es un firme principio doctrinario y financiero enseñado por el Señor en la parábola de los talentos y vivido por la Iglesia y sus miembros. Todos los fondos de la Iglesia existen por la única razón de apoyar la misión divinamente asignada de la Iglesia”, expresó la institución religiosa.
La Iglesia mormona afirmó que las acusaciones están basadas en una “estrecha perspectiva y limitada información” y aseguró que cumple con todas las leyes aplicables en cuanto a sus donaciones, inversiones, impuestos y reservas.