Ainoa Buitrago tiene algo que decir. Y no sólo con su música. Con tan sólo 24 años, la cantante madrileña es una de las artistas con las ideas más claras del panorama actual. Su discurso es como sus canciones, sale del corazón. Ahora, con un nuevo sonido, atiende a Mundo Deportivo y nos habla no sólo de su último tema, sino también de la gira y del momento que vive la industria musical.
Explorando nace ‘Cada día’, su último tema
Aunque distinto a lo que nos tenía acostumbrados, ‘Cada Día’ es también parte de Ainoa Buitrago: “Esta canción no nace de buscar un sonido nuevo, pero surgió. Empezamos a hacerla haciendo un poco el tonto, pero cuando la acabamos dijimos ‘hostia, cómo mola’”. Pese a ello, tiene claro que “mis canciones son mías y me salen del alma, entonces por mucho que el sonido sea distinto, no cambia mucho”.
“Este nuevo sonido si lo tuviera que definir con una palabra sería ‘explorar’. Ya que tengo la posibilidad de hacer yo mis canciones, vamos a probar a ver qué pasa. Buscar un sonido y ver cómo lo vestimos”, cuenta sobre cómo nació su última canción de la que cuenta que disfruta mucho tocando en directo.
No es la primera vez que Ainoa visita Mundo Deportivo. La madrileña se sentó en nuestro plató en noviembre de 2021. Poco más de un año después, y más segura que nunca, la evolución de su carrera es latente: “Para nada esperaba lo que he conseguido en tan poco tiempo. Yo vengo de componer canciones en mi habitación, de escuchar muchísima música de autor. Todo ha ido evolucionando muy rápido”.
“Para nada esperaba lo que he conseguido en tan poco tiempo”
El acelerado momento que vive la industria musical
Aunque ha sabido encontrar su hueco, Ainoa tiene claro que las reglas del juego no son iguales para todos: “Al final, todo el mundo en su casa puede hacer una canción y puede producir una canción. Pero claro, entras en un mundo de competición en el que tú estás sacando un disco un viernes y Bad Bunny también. Entonces piensas, no voy a llegar nunca a un número uno. Estoy en la misma plataforma, pero no puedo competir con Bad Bunny. Tampoco con José Mercé, que es gente con un recorrido súper grande”.
“Todos consumimos la música de forma acelerada. Todos los viernes, cada semana, hay música nueva. Todos los días, a todas horas, se sacan canciones. Y por ello, ahora te canto ‘Titi me preguntó’ que fue un bombazo el año pasado y ya es antigua. También como personas que consumimos música es nuestra conciencia decir ‘hay un curro de la leche detrás’. También va muy hilado con el género de la música que se saque. Por ejemplo, el género urbano o las canciones que suenan en discotecas… Mis canciones no van a sonar en discotecas, que a lo mejor hago reggaeton y lo peto un montón. Pero una canción de Dani Fernández, de Paula Mattheus o mía es otro proceso. Esas canciones van a sonar en otros sitios”, reflexiona sobre la aceleración de la industria.
Sin embargo, deja claro que, pese a ello, “lo bueno de la música es que da espacio, la cosa es encontrarlo. Sí que es verdad que los que nos hemos puesto a sacar canciones cada mes, mes y medio también hemos colaborado en eso. Pero creo que se está frenando un poco. Un disco de 12 canciones en el que tienes que grabar una batería real, un bajo, tienes que hacer arreglos, tienes que hacer un cuarteto de cuerdas, no se puede comparar con un beat que se hace con splice, que se hace con mucho menos tiempo. Y no devaluo para nada el curro de la gente, pero es un proceso diferente“.
“No podemos exponernos a estar cada dos meses sacando música, porque tienes gira, tienes promoción, tienes que componer y producir, grabar, grabar un videoclip, tienes que mezclar, masterizar la canción, todo el mundo de tu equipo tiene que estar de acuerdo… Y tienes sólo dos meses para eso. Una artista como yo que vive de tocar, no puede parar de tocar para hacer todo eso. Al final te acabas suicidando emocionalmente y dices ‘no me da la vida’. Estamos encontrando un punto medio en el que dices, no paro de sacar música, pero tampoco me voy a esclavizar”, finaliza la propia Ainoa Buitrago.
“Una artista como yo que vive de tocar, no puede parar de tocar para hacer todo eso”