Parece mentira que en la era de lo políticamente correcto y de su correspondiente cancelación, el Festival de Cine de Venecia vaya a estrenar tres películas, de tres directores denostados por las polémicas y casos de abusos. Por lo que conforme se acerque la fecha del certamen, comenzaremos a ver de seguro, protestas por parte de colectivos y ciertos artistas de la escena. Estos controvertidos cineastas son Roman Polanski, Woody Allen y Luc Besson.
Este gesto estratégico y permisividad donde otros festivales no han entrado es, claramente, una declaración de intenciones y para muchos, el respaldo al comportamiento abusivo. Los tres directores han sido acusados de acoso y agresión sexual y, concretamente, Polanski ha vivido muchos años en Europa después de estar perseguido por la justicia en suelo estadounidense. Hace poco, Besson fue acusado de varios comportamientos de este tipo, aunque también recientemente fue absuelto de uno de ellos. Por último, el director de Manhattan fue acusado de comportamiento inapropiado por parte de su hija adoptiva. Situación avivada tras la publicación de las memorias de esta y del documental Allen v. Farrow.
¿El fin del ‘Me too’?
La inclusión de los tres directores en el Festival de Cine de Venecia seguramente despertará la ira en las redes, ya que gran parte del movimiento #Metoo surgido en 2017 ha repercutido contra los muros aparentemente impenetrables de la industria cinematográfica, que a veces parece tener la intención de duplicar su inversión en figuras tan controvertidas como Polanski. El director de ascendencia polaca ganó el Oscar a Mejor Director y mejor Película por El pianista en 2003 y no pudo asistir, debido a su huida a territorio europeo ya que si hubiese pisado el suelo del país americano la justicia lo hubiera detenido de inmediato.
Alberto Barbera, director creativo del certamen, no parece preocupado por el efecto de la cancelación pues ya fue el encargado de promover el preestreno de El oficial y el espía en 2019, dejando a entender que se debe distinguir entre las responsabilidades del hombre y las del artista.
The Palace (Polanski), Dogman (Besson) y Coup de Chance (Allen) son las tres películas que llegarán al evento audiovisual italiano a finales de agosto y principios de septiembre. ¿Cómo reaccionará el público y los asistentes? Tendremos que esperar a que se acerque la fecha definitiva.
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