Una fuerte explosión tuvo lugar este miércoles frente al Ministerio de Exteriores en Kabul, atentado que provocó la muerte de al menos menos cinco personas y decenas más con lesiones, informaron a EFE fuentes del Gobierno de los talibanes.
El ataque con bomba tuvo lugar hacia las 16.00 horas (11.30 GMT) en la calle de acceso al Ministerio de Relaciones Exteriores, afirmó a EFE el portavoz del Ministerio, Hafiz Zia Ahmad Takel.
“Lamentablemente la explosión produjo víctimas y el equipo de evaluación de seguridad ha llegado a la zona. Los detalles se compartirán más adelante”, anotó el portavoz.
El ataque con bomba tuvo lugar hacia las 16.00 hora local (11.30 GMT) en la calle de acceso al Ministerio de Relaciones Exteriores, afirmó a EFE el portavoz del Ministerio, Hafiz Zia Ahmad Takel.
Como resultado del atentado “fallecieron cinco civiles y varios resultaron heridos”, agregó el portavoz, que condenó el ataque.
Nisar Khan, un testigo ocular, dijo a EFE que había unos 15 cuerpos en el suelo instantes después de la explosión, sin indicar que si se trataba de fallecidos o heridos, y señaló que los talibanes evacuaron la zona.
Imágenes posteriores al atentado compartidas en redes sociales muestran varios cuerpos inertes en el suelo, mientras varias personas de las proximidades acuden a socorrerlos.
A suicide bomber tried to enter ministry of foreign Affairs in #kabul but the guards identified him. When he was confronted he blew himself near the gate, wounded and killed many civilians. pic.twitter.com/A3MRN6ewQB
— Rahim لغماني (@RahimLaghmani) January 11, 2023
En otro vídeo aparecen un grupo numeroso de personas congregadas frente al hospital al que fueron trasladados los heridos, donde comprueban en una hoja en la pared el nombre de las víctimas de la explosión, según reveló el canal local Tolo News.
El ataque, que no ha sido reivindicado por ninguna organización, sigue el mismo patrón de otros reclamados por el grupo yihadista Estado Islámico (EI).
Los fundamentalistas mantienen una fuerte rivalidad con la formación terrorista, que emergió como una de las principales amenazas para la seguridad en Afganistán tras el ascenso al poder de los talibanes en agosto de 2021.
Varias personas murieron y otras resultaron heridas el pasado 1 de enero, cuando un suicida del grupo yihadista penetró en la zona militar del aeropuerto de Kabul y se inmoló, aunque el Gobierno interino de los talibanes no aportó una cifra oficial de víctimas
Ante el aumento de este tipo de ataques reivindicados por el EI, las fuerzas de seguridad afganas han intensificado el número de operaciones para desmantelar escondites del grupo yihadista por todo el país.