Continúa la tragedia para el actor de Hollywood Alec Baldwin: Nuevas pruebas forenses del FBI concluyen que el arma que portaba el actor, y que acabó con la vida de la directora de fotografía Halyna Hutchins, no podría haber sido disparada sin apretar el gatillo. Según los informes, el arma de fuego utilizada durante el tiroteo “no podía dispararse sin apretar el gatillo”, apuntan diversos medios.
El pasado mes de diciembre, Baldwin concedía una entrevista a ABC News, donde señaló que no había apretado el gatillo, haciendo hincapié en este detalle: “No se apretó el gatillo. No apreté el gatillo”. El actor insistió en que se limitó a seguir las instrucciones de la propia directora de fotografía, por lo que amartilló el arma para ponerla en posición de disparo durante un ensayo de posiciones de cámara: “Ella está al lado de la cámara. La cámara está aquí. Ella me está dando instrucciones sobre cómo quiere el ángulo de imagen de la escena y yo saco el arma”.
Asimismo, Baldwin añadió: “No estoy apuntando a la lente de la cámara. Sostengo el arma donde ella me dice que la sostenga. Que resultó ser debajo de su axila. (…) Continuamos y entonces empiezo a amartillar el arma. No voy a disparar. Ella dice: “solo represéntalo, ¿puedes verlo?”. Y luego suelto el martillo de la pistola y la pistola se dispara”.
Tras el accidente, Baldwin permaneció de pie durante un minuto junto a la víctima, que todavía permanecía con vida y consciente, hasta que perdió la conciencia. En cuanto a la bala que se encontraba dentro del arma, el actor aclara: “Alguien puso munición real en esa pistola, una bala que ni siquiera debía estar en el edificio (…) No puedo decir quién fue pero no fui yo”.
El director de la película también resultó herido
Este trágico caso fue clasificado como un accidente por la Oficina del Investigador Médico de Nuevo México, ya que el informe indicó que «la revisión de los informes policiales disponibles no mostró ninguna demostración convincente de que el arma de fuego se cargó intencionalmente con munición real en el set». Tras las últimas novedades, las autoridades locales no han tomado ninguna decisión de acusación en el caso y los detectives esperan registros telefónicos de Baldwin para continuar con la investigación.
El accidente tuvo lugar durante el rodaje de la película Rust, en Nuevo México. En un principio Hannah Gutiérrez, armera contratada para la película, fue acusada como responsable de que hubiese munición real en el set de rodaje. Aún así, poco después varios trabajadores destacaron la falta de seguridad en el lugar donde se rodaba la película. Tras el accidente, Halyna Hutchins, de 42 años, falleció por las graves heridas mientras era trasladada en helicóptero al University of New México Hospital de Albuquerque.