“No hay evidencia de ningún tipo de que el presidente haya ordenado la censura o el hostigamiento”, aseguró Sergio Aguayo.
La politóloga Denisse Dresser, quien firmó el desplegado “Esto tiene que parar”, dijo que hizo esto porque defiende la libertad de expresión cuando se ve amenazada y es ahora el caso porque a su parecer el presidente Andrés Manuel López Obrador “no comprende la crítica”.
En la Mesa Política de este lunes, lamentó que “no pasan ni 24 horas” cuando el mandatario ya descalifica a algún actor o usa un tono “agresivo” contra quien desee, principalmente sus críticos.
“Mañanera tras mañanera ahonda diferencias” entre los mexicanos y “estigmatiza”, asevero.
Y es que “tenemos a un presidente que le gusta gobernar enfrentando“, consideró y crea así “supuestos enemigos del cambio, supuestos derechistas, supuestos privilegiados que se sienten resentidos”.
Para la doctora, el presidente “conserva el talante de rebelde permanente” ahora que es jefe de Estado, y desde su gobierno se agrede a quienes encabezan luchas sociales, como Javier Sicilia, mientras se defiende a Manuel Bartlett.
En contraste, el historiador Lorenzo Meyer dijo que no ve dónde esté coartada la libertad de expresión como aseguran los firmantes del desplegado.
Expuso que “el presidente usa su puesto para hacer una exposición de su proyecto político, cosa rarísima que no se ve en ningún otro jefe de Estado”.
Si esto lo ven como una amenaza, los que están inconformes deberían hacer su propia “mañanera” para refutar al gobierno, opinó. Y “si hay censura no los dejan”.
No obstante, reconoció la “dureza” en el discurso del presidente, además de que “el país está dividido pero es imposible que no lo esté” porque se están tocando intereses.
“Es penoso ver la división que se da en todos los sitios, incluso dentro de las familias pero no ha llegado la sangre al río ni hay una acción que uno pueda decir aquí la amenaza cumplida de censura”, afirmó.
Aunque agregó que en materia de libertad de expresión, eso sí, la vida de periodistas a nivel local “va a seguir siendo una vida muy peligrosa si van contra los intereses creados” mientras el Estado no es capaz de brindarles seguridad.
A su vez, el académico Sergio Aguayo lamentó que crezcan el odio y descalificación entre quienes apoyan y los detractores del presidente.
Apuntó que en México la libertad de expresión está bajo asedio pero por narcotraficantes e incluso algunos empresarios.
“No hay evidencia de ningún tipo de que el presidente haya ordenado la censura o el hostigamiento“, mencionó, sin embargo sí hay evidencia de que una dependencia, Notimex, bajo la dirección de Sanjuana Martínez, hostigó a trabajadores en huelga.
En ese sentido “no sabemos cuántas dependencias o funcionarios han sentido la tentación de castigar a sus críticos, utilizando por ejemplo los ejércitos de bots”.
Reconoció que hay grupos de parte del gobierno y la oposición dispuestos a descalificar y con deseo “de aniquilar al otro”.
Por su parte, dijo, “yo no me he sentido censurado ahora“.
Sin embargo, añadió que las amenazas a la libertad de expresión no vienen solamente del gobierno federal sino de gobiernos estatales y locales, a los que no señalan los firmantes del desplegado contra AMLO.
Ve aquí la mesa de este lunes:
