El presidente Andrés Manuel López Obrador concedió la mañana de este jueves una “entrevista” a la periodista Nancy Flores durante la mañanera, en la cuál, se lanzó contra el dirigente del PAN, Marko Cortés, y el bloque conservador, a los que calificó como “corruptos” e “hipócritas”.
Al referirse al dirigente del PAN, el principal partido opositor en este momento, López Obrador citó una entrevista que reconoció no haber leído o visto, destacando que en ella Cortés admitió que “ellos (los conservadores) debieron de haberse opuesto a los programas de bienestar”.
AMLO aseguró que esta postura, además de incorrecta, va de la mano de su “doctrina” en la que “son partidarios de la falacia, engañabobos, que crearon en el periodo neoliberal, de que en vez de entregar un pez, había que enseñar a pescar”.
Dijo que esa es una “concepción ridícula” y reiteró su argumento de que “es obligación del Estado, conseguir la felicidad del pueblo?”.
¿El Estado puede incumplir con su responsabilidad social? Pero aparte de ser un absurdo […] es la hipocresía.
El presidente también criticó, aunque sin mencionar por nombre, a Xóchitl Gálvez Ruíz, quien fue candidata a la presidencia por la coalición PRI-PAN-PRD: “¿Qué no la candidata firmó que iban a mantener los programas de bienestar? […] Son unos mentirosos hipócritas”.
Cometieron el error garrafal de pensar que el pueblo es tonto.
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¿Qué pasó con juzgar a expresidentes por casos de corrupción?
Las declaraciones del mandatario se dieron en respuesta la primera pregunta de la “entrevista” de Nancy Flores, quien le cuestionó sobre la promesa de no impunidad a los expresidentes y las acciones que le merece el tema, más allá de la consulta ciudadana que se realizó en en los primeros años de su sexenio.
El presidente afirmó que él fue muy claro desde su discurso de toma de posesión en 2018, cuando habló de que “teníamos que optar entre meter a la cárcel a muchos que habían cometido actos de corrupción, empezando por expresidentes, o pensar en el futuro de darle vuelta a la página y demostrar que era posible acabar con la corrupción”.
Con esto, afirmó, su gobierno optó por una “verdadera transformación” y no por la “persecución” como en sexenios anteriores, destacando principalmente el caso de Carlos Salinas de Gortari, a quién llamó el “padre de la desigualdad”.
“Nos iba a llevar muchísimo tiempo y no íbamos a poder sentar las bases de la transformación […] es justicia también la no repetición” de la misma manera que es meter a un corrupto a la cárcel, continuó AMLO.
Sabía que al final me iban a decir los mismos mafiosos, que yo había tolerado la corrupción y no había había yo castigado, investigado, encarcelado a expresidentes o a otros altos funcionarios públicos.
Cuestiono que le digan cómplice de la corrupción, cuando convocó a una consulta “para que el pueblo decidiera de conformidad con la Constitución”.
En este marco, acusó a los medios de estar controlados por los grupos de intereses creados, argumentando que no les importó y que tampoco difundieron que se iba a hacer la consulta”; además de criticar a los partidos opositores por convocar a no participar.
De acuerdo a la ley, para que el resultado fuera vinculatorio se requería una participación mayor del 40% del padrón electoral, cifra que no se alcanzó. “La mayoría de los que participaron si pidieron iniciar procesos contra expresidentes”.
“ Lo que hemos hecho entre todos de no tolerar la corrupción, de denunciarla, porque antes, no solo se fomentaba, se toleraba y se veía como cuestión normal […] no existía la palabra corrupción en el discurso político”;acusó que no se hablaba de ello en el Congreso, academia o Poder Judicial.
“Ya no es como antes, esa tolerancia ya no existe”, ahora la gente denuncia y “ahí están los resultados electorales”.
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