Anna Ortiz nos presenta ‘Mi luz’, un libro que nunca se imaginó escribiendo pero que lleva como título el apodo que eligió para ella su marido, el futbolista Andrés Iniesta. Este inesperado proyecto ha ayudado a la catalana a redescubrirse y a “crecer como persona”. “Explicar cosas sobre mí que no son fáciles me ha ayudado muchísimo”, explica.
Con el “corazón preparado” para abrirse en canal sobre algunas de las facetas más dolorosas de su vida, Anna habla en el libro sobre la pérdida de su hijo y la depresión por la que pasó el excapitán azulgrana.
“Esos capítulos fueron los más complicados de escribir. Yo lo tenía dentro y sabía lo que quería decir pero cuesta expresar estas cosas. Le di muchas vueltas”, confiesa. “Es duro porque tienes que revivir dos episodios de tu vida que han sido dolorosos y traumáticos”. Sin embargo, Anna transmite que consiguió “darle la vuelta” y se dio cuenta que escribir le estaba “ayudando a superarlo”. “Según iba avanzando, lo iba compartiendo todo con Andrés, y nos ha servido como pareja para ser más fuertes”, insiste.
Por otro lado, Anna celebra poder ayudar a otras personas con su testimonio. “Ahora se empieza a hablar mucho más sobre estos temas pero antiguamente no se hablaba sobre la pérdida de un bebé o sobre la depresión”, lamenta. “No siento que sea una responsabilidad pero haciéndolo público podemos llegar a mucha más gente”. Nadadora y amante del mar, Anna practica yoga y medita a diario. “Me da equilibrio. Vivimos con el piloto automático puesto y meditar me ayuda a tener paz mental. Soy una persona que necesita tener mis ratos a solas y mi silencio”, concluye.