El Presidente pidió “garantizar ante toda circunstancia la libertad y abandonar la tentación de imponer medidas autoritarias como el confinamiento excesivo o el toque de queda”.
Durante su participación en el primer día de la cumbre virtual del G20, el presidente Andrés Manuel López Obrador señaló que ante la pandemia Covid-19, la atención médica, las vacunas y las medicinas, deben ser gratuitas y de aplicación universal.
Este sábado, frente a los líderes de las 20 economías más importantes del mundo, el mandatario mexicano reiteró que debe cumplirse el compromiso de los Estados a garantizar la salud de sus poblaciones. Dijo que en el marco de la emergencia sanitaria a nivel mundial por la pandemia, el camino a seguir es el establecido en la resolución de México, para evitar acaparamiento de medicamentos, aprobada en la ONU casi por unanimidad.
“Enfrentar las dos crisis, la sanitaria y la económica, nos ha dejado sufrimientos y calaminadades, pero también lecciones importantes“, dijo López Obrador.
En la videoconferencia en la que participaron figuras políticas como el rey de Arabia Saudita, Salman Bin Abdulaziz, quien presidió el encuentro; la canciller alemana Angela Merkel, el primer ministro candiense Justin Trudeau; el presidente ruso Vladimir Putin, y el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres.
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AMLO enumeró una lista de lecciones importantes que ha dejado la pandemia del coronavirus durante 2020. Comenzó por señalar que la salud es un derecho humano fundamental que el Estado tiene que garantizar, haciendo a un lado en afán de lucro.
Agregó que “es mejor prevenir que curar, de ahí la importancia de promover una alimentación saludable, evitar los productos con exceso de sal, azúcares, exceso de grasas y químicos”.
Participamos en la Cumbre Virtual de Líderes del G20. pic.twitter.com/vDBi0g62DT
— Andrés Manuel (@lopezobrador_) November 21, 2020
“Tengamos en cuenta que los más afectados en la pandemia han sido los enfermos de hipertensión, diabetes y obesidad, y estas enfermedades crónicas“.
El Presidente mexicano hizo un llamado a considerar a la familia como la principal institución de seguridad social, evitar su desintegración y no abandonar a los adultos mayores en albergues o asilos, que por confortables que sean, “nunca suplirán el amor que ofrecen los seres queridos”.
Además, pidió confiar más en la responsabilidad de la gente, “garantizar ante toda circunstancia la libertad y abandonar la tentación de imponer medidas autoritarias como el confinamiento excesivo o el toque de queda; nada por la fuerza, todo por el convencimiento y la razón”.
“El rescate económico debe hacerse de abajo hacia arriba. Primero, ayuda a los pobres y no centrar las acciones gubernamentales solo a destinar fondos públicos a empresas o a instituciones financieras en quiebra”.
Por último, pidió no convertir las deudas privadas, en públicas, vitar el endeudamiento y menos aún, si es en beneficio de pocos y a costa del sufrimiento de muchos y de las nuevas generaciones. De este último punto, el Presidente mexicano aseguró que hablará el domingo durante el segundo día de la cumbre mundial.