Países Bajos entrará en un estricto bloqueo durante el periodo de Navidad y Año Nuevo para tratar de contener la variante ómicron del coronavirus, dijo el sábado el primer ministro Mark Rutte.
Todas las tiendas y servicios no esenciales, incluidos restaurantes, peluquerías, museos y gimnasios, permanecerán cerrados desde el domingo hasta el 14 de enero. Las escuelas permanecerán cerradas hasta al menos el 9 de enero.
“Holanda está viviendo un cierre nuevamente. Eso es inevitable debido a la quinta ola que viene hacia nosotros con la variante ómicron”, dijo Rutte en una rueda de prensa televisada.
Otras medidas incluyen la recomendación de que los hogares no reciban más de dos visitantes y que las reuniones al aire libre también estén limitadas a un máximo de dos personas.
No actuar ahora probablemente conduciría a “una situación inmanejable en los hospitales”, que ya han reducido la atención regular para hacer espacio para los pacientes con COVID-19, dijo Rutte.
Los casos de ómicron han aumentado desde que la variante apareció por primera vez en Países Bajos hace tres semanas, mientras que los hospitales tratan de atender a una gran cantidad de pacientes con Covid-19 en sus salas, cerca de los niveles más altos de este año.
Se espera que ómicron se convierta en la variante dominante del virus en los Países Bajos en los próximos días.
Si bien más del 85% de la población adulta holandesa está vacunada, menos del 9% de los adultos han recibido una vacuna de refuerzo, una de las tasas más bajas de Europa.
El sábado, el Instituto Nacional de Salud Pública (RIVM) informó un total de más de 2.9 millones de casos de Covid-19 desde el inicio de la pandemia, con 20 mil 420 muertes reportadas. Se notificaron 14 mil 616 nuevas infecciones en 24 horas.
Reuters
Source link