El Secretario de la Defensa Nacional (Sedena), Luis Cresencio Sandoval, negó que las armas halladas en México, traficadas desde Estados Unidos, provengan del Ejército estadounidense.
“No es que sea armamento del ejercito de EU. No, es armamento de uso militar, armamento que en todo el mundo es empleado por las Fuerzas Armadas”, declaró este jueves durante la conferencia de prensa matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador.
El general explicó que esto se determina por el calibre de cada arma. Detalló que el pasado 10 de enero se registró una agresión a personal militar con municiones de este calibre.
De acuerdo con Sandoval, de las más de 47 mil armas aseguradas en la actual administración, el 70% provienen de Estados Unidos. Entre estas se han encontrado varias de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas.
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En enero, la titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Alicia Bárcena, sostuvo que la Sedena ha asegurado a integrantes del crimen organizado armas estadounidenses de uso militar.
“La Secretaría de la Defensa alertó a los Estados Unidos sobre armas que están entrando a México, que son de uso exclusivo del Ejército estadounidense”, declaró durante la conferencia de prensa matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Ante esto, el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, negó que las armas detectadas en México pertenezcan al Ejército de EU, aún si tienen el mismo calibre.
No obstante, reconoció que estas no deben de estar en manos del crimen organizado.
El presidente López Obrador aseguró el miércoles que la mitad del 70% de las armas en entran a México por EU, provienen de Texas, por lo que exigió una explicación al gobernador del estado, el republicano Greg Abbott, con quien ha chocado por sus políticas antiinmigrantes, como la instalación de boyas en el fronterizo río Bravo o Grande y el cerco de púas que ha provocado la muerte de migrantes.
Detener el tráfico de armas de Estados Unidos a México ha sido uno de los principales reclamos del Gobierno de López Obrador, que en agosto de 2021 demandó a 11 empresas estadounidenses que fabrican y venden armas, a las que acusa de negligencia por facilitar que caigan en manos de criminales mexicano.
En enero pasado, la canciller Alicia Bárcena afirmó que en una reunión con funcionarios en Washington advirtieron sobre la presencia en México de armas de uso exclusivo del Ejército de Estados Unidos, aunque el embajador estadounidense, Ken Salazar, negó que fuesen propiedad de las Fuerzas Armadas.
La tensión entre Estados Unidos y México se ha elevado porque, además del creciente tráfico de fentanilo y los niveles récord de migración, las elecciones presidenciales de ambos países coinciden este 2024.
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