Desde que estalló la pandemia del coronavirus la tecnología se ha convertido en la mejor aliada para combatir la enfermedad. Ahora, el colgante de la NASA ayuda a evitar que las personas se toquen la cara, un gesto involuntario pero que favorece en gran medida la propagación del Covid-19. La agencia espacial norteamericana está detrás de este «invento», al que ha bautizado como «Pulse».
Es precisamente el tocarse la cara una de las principales vías de propagación del coronavirus. ¿Cómo? En primer lugar se toca con la mano un objeto contaminado y, si a continuación, esa mano se lleva a la nariz, a la boca o a los ojos, el virus puede ingresar en el organismo.
¿Cómo es el colgante de la NASA?
El colgante, en cuanto detecta que la mano se está acercando al rostro, vibra. Por lo tanto, el objetivo no es otro que «educar» y advertir del riesgo potencial de tocarse la cara. Ahora bien, la NASA no vende «Pulse», sino que facilita el modelo para que quien quiera fabricarlo pueda hacerlo.
¿Qué es lo que se necesita? Una impresora 3D, una herramienta para soldar, un motor y varios cables, entre otros elementos electrónicos. Por lo tanto, queda descartado que alguno de nosotros pueda fabricar el colgante de la NASA contra el coronavirus en casa.
A small team at JPL developed PULSE, a 3D-printed wearable pendant that vibrates when a person’s hand nears their face reminding them to avoid touching it in order to reduce potential #COVID19 infection. It’s open source for everyone to make and refine: https://t.co/1WGb5yHj7I
— NASA JPL (@NASAJPL) June 25, 2020
Aún así, la agencia espacial pone a disposición de todo el mundo las instrucciones de los pasos a seguir para su fabricación. No hace falta obtener derechos ni pagar patentes, es 100% gratuito. Las empresas también pueden fabricar «Pulse» y ponerlo a la venta si lo desean.
Este no es el primer «invento» de la NASA para frenar la propagación del Covid-19. La agencia ya diseñó hace unos meses un prototipo del ventilador VITAL para pacientes enfermos de coronavirus.