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Así es el pequeño ordenador que funciona gracias a la fotosíntesis de algas marinas

Así es el pequeño ordenador que funciona gracias a la fotosíntesis de algas marinas

Un pequeño ordenador ha conseguido funcionar durante más de medio año utilizando algas marinas como fuente de energía. Es el último hito que han conseguido investigadores de la Universidad de Cambridge, cuyos hallazgos han sido publicados en la revista Energy & Environmental Science.

“Se necesitan fuentes de energía eléctrica sostenibles, asequibles y descentralizadas para alimentar la red de dispositivos electrónicos”, explican los investigadores a la hora de empezar a hablar de este nuevo proyecto. Y es que el objetivo de estos científicos era obtener nuevas formas de energía para alimentar lo que se conoce como el internet de las cosas

En busca de energía sostenible

Este internet no es el que utilizamos en nuestros dispositivos electrónicos como el móvil o el ordenador, sino que se trata del internet que mantiene conectados objetos como electrodomésticos, vehículos o sensores ambientales. El problema es que las baterías que mantienen el funcionamiento de estos aparatos dependen en gran medida de materiales caros e insostenibles y su carga acaba agotándose.

Sí que existen energías existentes sostenibles, como la energía solar, la de temperatura o la de vibración, que son más duraderas. Sin embargo, estas pueden tener efectos adversos en el medio ambiente (por ejemplo, en la producción de los fotovoltaicos se utilizan materiales peligrosos).

Fotosíntesis de algas marinas

Por ello ha sido fundamental para estos investigadores encontrar nuevos métodos para generar energía. En concreto, la Universidad de Cambridge ha encontrado un método basado en la naturaleza en el que también se emplea la energía solar, pero sin necesidad de baterías convencionales. Hablamos de la fotosíntesis de algas.

El alga elegida para completar este hito es un tipo de cianobacteria llamada Synechocystis sp. PCC 6803, comúnmente conocida como alga azul-verde. “Aquí describimos un sistema cosechador de energía biofotovoltaica que utiliza microorganismos fotosintéticos sobre un ánodo de aluminio y que puede alimentar un microprocesador Arm Cortex M0+”, explican los investigadores. 

Esta es la pequeña computadora que ha conseguido funcionar con la fotosíntesis de algas.

Universidad de Cambridge

El resultado de la investigación es una celda fotovoltaica biológica creada con este alga, capaz de producir cuatro microvatios por centímetro cuadrado. Pero lo más sorprendente es que incluso cuando se dejaron en oscuridad las algas siguieron aprovechando sus reservas de nutrientes y produciendo electricidad.

Aunque ahora mismo la tecnología se ha probado en una computadora pequeña, este descubrimiento puede convertirse en algo útil para áreas rurales de bajos y medianos ingresos que tengan dificultades para acceder a otro tipo de energías.




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