Paz Padilla está viviendo una tarde muy especial tras regresar a ‘Sálvame’. Después de 60 días de ausencia, la gaditana ha vuelto a coger las riendas del diario y lo ha hecho con una espectacular acogida por parte de sus compañeros de programa. Todavía colea su desgarradora entrevista del pasado sábado en el ‘Deluxe’ donde dio toda una lección de vida, entereza y optimismo para todos aquellos que estén superando la muerte de un ser querido. A ella le ha tocado por partida triple ya que en cinco meses ha perdido a su madre, a su suegra, y a Antonio, su marido y «alma gemela», como ella misma lo definía.
Este miércoles tocaba volver a la faena después del vaivén de emociones de las últimas semanas y Paz ha tenido una calurosa bienvenida. El programa ha comenzado con la imagen de espaldas de la presentadora sentada en un sofá, sin iluminación y mirando una pantalla con el cielo estrellado. Sobre ella se han proyectado algunas de las imágenes de su historia de amor con Antonio y las bonitas palabras de apoyo que varios de sus compañeros de Telecinco le han dedicado estos días.
Tras la vuelta de publicidad, Paz Padilla aparecía ante el equipo de colaboradores, que la ha recibido con un aplauso cerrado. La andaluza ha elegido un vestido midi rosa con estampado paisley y maxi cinturón negro. La nota emotiva es la alianza de boda que lleva colgada del cuello a modo de collar. Paz ha querido agradecer el cariño: «Este es otro escalón que subir. He tenido un recibimiento precioso por parte de ‘Sálvame’, pero son 52 días sin trabajar y ya tenía ganas». «Tengo una amiga muy espiritual que me dijo que cuando ayudas a alguien a trascender, que es como se refiere a morir, y yo ayudé a trascender a Antonio, recibes un regalo. Y yo ya sé cuál es regalo que he recibido: el cariño que he recibido de todos, y de todos vosotros», ha continuado.
Sobre su entrevista en ‘Sábado Deluxe’ se ha mostrado muy feliz al haber conseguido su objetivo: «El domingo fue precioso porque llegué a casa y me senté a ver si la gente había entendido mi mensaje de esperanza, de ánimo, de ser feliz ante la adversidad». Paz ha insistido mucho en que se entendieran sus sentimientos y ha tenido un amable intercambio de palabras con la colaboradora Gema López cuando esta le ha hablado del dolor: «No siento dolor, siento tristeza. No hay que confundir los términos». Por último, ha recalcado la necesidad de «moverse por amor» y de «mirar en nuestro interior para conocernos a nosotros mismos porque no nos conocemos y sin hacerlo no podemos afrontar los problemas de la vida».