Alrededor de una decena de proyectiles han impactado a primera hora de este miércoles en una base militar en Irak que acoge a tropas de Estados Unidos y de la coalición internacional, sin que por el momento haya informaciones sobre víctimas ni reclamación de la autoría del ataque.
El portavoz de la coalición, Wayne Marotto, confirmó a través de su cuenta en la red social Twitter el ataque contra la base de Ain al Assad y resaltó que “las fuerzas de seguridad iraquíes están encabezando la respuesta y la investigación”.
Initial report: 10 IDF rockets targeted an Iraqi military base, Al Asad Airbase, hosting Coalition troops, on March 03, 2021 at approx 7:20 a.m. (Iraqi time). Iraqi SF are leading the response & investigation. Further information will be released as it becomes available.
— OIR Spokesman Col. Wayne Marotto (@OIRSpox) March 3, 2021
Así, señaló que “las informaciones iniciales” apuntan a que se dispararon diez cohetes contra las instalaciones y ha agregado que “se publicará más información cuando esté disponible”.
Por su parte, la Célula de Seguridad de Medios confirmó el impacto de diez proyectiles en la base y ha añadió que “no hay pérdidas significativas”, al tiempo que ha resaltó que las fuerzas de seguridad encontraron el lugar desde el que se realizaron los disparos.
En este sentido, fuentes de seguridad citadas por la agencia iraquí de noticias NINA apuntaron que el ataque fue ejecutado con cohetes Katyusha, al tiempo que resaltaron que por ahora “no se sabe si hay pérdidas o daños”.
Fuentes del Estado Mayor de la Defensa (EMAD) detallaron a Europa Press que los 70 militares españoles presentes en la base resultaron ilesos y han puntualizado que el resto de contingentes internacionales tampoco sufrieron bajas.
En un segundo incidente, un convoy logístico de apoyo a la coalición fue alcanzado por la explosión de una bomba en una carretera en Diuaniya (centro), incidente que se saldó con daños materiales, sin que por el momento hayan trascendido informaciones sobre víctimas.
El suceso tiene lugar días después de un ataque aéreo de Estados Unidos contra posiciones de las Fuerzas de Movilización Popular (FMP) en la frontera siria, en respuesta a los últimos ataques con proyectiles por parte de milicias apoyadas por Irán contra instalaciones internacionales en el país.
La base de Ain al Assad fue objetivo el año pasado de un ataque con misiles por parte de Irán en respuesta a la muerte del jefe de la Fuerza Quds de la Guardia Revolucionaria, Qasem Soleimani, en un bombardeo estadounidense en el aeropuerto de Bagdad.